MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las escuelas enfrentan desafíos inesperados cuando se trata de emergencias médicas, y los datos recientes muestran que las llamadas a los servicios de emergencia podrían estar señalando problemas que pocos anticipan. Prepararse para lo inesperado es más importante que nunca, y entender qué está sucediendo puede marcar la diferencia entre una respuesta eficaz y una oportunidad perdida.
Las tres razones más comunes por las que las escuelas llamaron a los servicios médicos de emergencia (SME) en Estados Unidos fueron por crisis neurológicas como convulsiones, condiciones psiquiátricas o abuso de sustancias y lesiones relacionadas con traumas, según datos del registro nacional de EMS analizados por investigadores del Hospital de Niños Ann & Robert H. Lurie de Chicago (Estados Unidos).
Durante el período de estudio (2018-2022), las emergencias médicas escolares representaron el 11% de las consultas de SME de niños y dos tercios resultaron en traslado al hospital. Los hallazgos, publicados en 'Pediatrics', pueden ayudar a las escuelas a priorizar la capacitación para que el personal pueda responder incluso antes de la llegada de los SEM.
"Si bien muchas escuelas han tomado medidas para garantizar su preparación ante emergencias médicas, muchas aún pueden mejorar su preparación", arguye el autor principal, el doctor Michael Harries, becario de Medicina de Emergencia Pediátrica en Lurie Children's. "Los resultados de nuestro estudio destacan áreas específicas para la capacitación del personal escolar, dado que la atención oportuna en una emergencia es esencial.
"También enfatizamos que ciertos medicamentos de emergencia deben estar disponibles en el entorno escolar, como las benzodiazepinas para las convulsiones, la epinefrina para las alergias alimentarias y el albuterol para el asma".
Los autores señalan que las iniciativas nacionales de promoción para la aprobación de la legislación sobre Escuelas Seguras contra las Convulsiones son continuas y eficaces. Diecinueve estados aprobaron legislación pertinente en 2022. El proyecto de ley modelo recomendado por la Fundación para la Epilepsia busca garantizar no solo la capacitación del personal, sino también la disponibilidad de medicamentos anticonvulsivos y la protección legal del personal de primeros auxilios.
La declaración de política de la Academia Estadounidense de Pediatría sobre emergencias médicas en las escuelas, emitida en 2022, especifica los programas de capacitación disponibles para el personal escolar y los medicamentos y equipos que las escuelas deben tener a mano para responder rápidamente a emergencias potencialmente mortales.
El estudio encontró que el trauma físico ocurrió con mayor frecuencia en estudiantes de edad escolar primaria (17 por ciento), mientras que las condiciones psiquiátricas y el abuso de sustancias fueron más comunes entre los adolescentes (18 por ciento).
"Dada la actual crisis de salud mental en los jóvenes, no nos sorprendió descubrir que las afecciones psiquiátricas y el abuso de sustancias se encontraban entre las emergencias más comunes en las escuelas", asegura el autor principal, el doctor Sriram Ramgopal, médico de urgencias del Lurie Children's Hospital y profesor adjunto de Pediatría en la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern (Estados Unidos).
"Nuestros hallazgos subrayan la necesidad de que las escuelas aborden de forma proactiva las necesidades de salud mental de los estudiantes, especialmente de los adolescentes. Esto puede incluir el establecimiento de relaciones con centros locales de salud mental y una mejor capacitación del personal sobre la mejor manera de responder ante una crisis psiquiátrica. En general, necesitamos políticas coherentes en todo el país para garantizar que todas las escuelas estén preparadas para emergencias médicas comunes".