MADRID, 27 Dic. (EDIZIONES) -
Hematoma, moratón, moretón, contusión o cardenal son las formas más conocidas de llamar a las zonas de la piel que sufren una descoloración cuando se rompen pequeños vasos sanguíneos debajo de la superficie corporal. Normalmente no se les da importancia porque ocurren por causas conocidas, sin embargo, en ocasiones, su causa es desconocida.
"Suelen aparecer tras caídas, lesiones deportivas, accidentes, extracciones sanguíneas, tras cirugías o traumatismos por objetos o por personas. También pueden ocasionarse por una ingesta de medicamentos como los anticoagulantes, la aspirina u otra medicación que ayuda para mejorar la circulación sanguínea, o bien pueden surgir de forma espontánea en enfermedades relacionadas con trastornos de la coagulación", subraya en una entrevista con Infosalus el coordinador nacional del grupo de vasculopatías de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), el doctor Manuel Frías Vargas.
Según indica, inicialmente hay dolor e hinchazón por la acumulación de la sangre, y son de color rojo oscuro o violáceo. Además, el experto explica que a medida que la sangre es eliminada y los pigmentos sanguíneos se descomponen disminuye la inflamación de los hematomas y adquieren un color verdoso o pardo amarillento.
"Aunque por lo general desaparecen completamente, a veces pueden dejar una mancha en la piel. Esto ocurre, sobre todo, con los hematomas grandes, localizados en zonas de la piel que han estado expuestas a la luz solar. No obstante, la desaparición de los hematomas suelen ocurrir en 2-3 semanas, generalmente", precisa el médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria en el Centro de Salud San Andrés de Madrid.
QUÉ HACER ANTE LA APARICIÓN DE UN MORATÓN
El también vocal de la directiva de SEMERGEN en Madrid también señala qué se debe hacer en aquellos casos en los que aparece un hematoma:
1.- Aplique hielo sobre el hematoma para reducir la inflamación. Eso sí, coloque el hielo envuelto en un trozo de tela y no lo aplique directamente sobre la piel, existe riesgo de quemadura. Aplique el hielo de 3-5 minutos al menos durante1 hora.
2.- No intente vaciar el hematoma con una aguja.
3.- No siga corriendo, jugando, ni realizando cualquier otra actividad utilizando la parte del cuerpo que presenta el dolor y el hematoma.
4.- No ignore el dolor ni la hinchazón.
Asimismo, el doctor Frías Vargas cree que se debería acudir al médico ante un hematoma ante estas situaciones:
- Si siente presión extrema en la parte del cuerpo afectada por el hematoma, especialmente si la zona es grande o duele mucho. "Esto puede deberse a una afección conocida como 'síndrome compartimental'.
El aumento de la presión en los tejidos y estructuras blandas debajo de la piel puede disminuir el suministro de sangre y oxígeno hacia los tejidos. Es importante acudir inmediatamente para una atención por profesionales sanitarios en esta posible situación", avisa.
- En el caso de presentar un hematoma sin que se haya surgido ninguna lesión previa, ni caída, ni haya otro motivo.
- Hay signos de infección alrededor de la zona del hematoma, como líneas de enrojecimiento, pus u otra secreción, o fiebre.
MUY IMPORTANTE LA PREVENCIÓN
En este contexto, el especialista de SEMERGEN subraya que es "muy importante" la prevención ya que los hematomas generalmente son el resultado directo de una lesión:
- Enséñeles a los niños normas de seguridad.
- Esté atento para evitar caídas en la casa. Por ejemplo, tenga cuidado al subir escaleras u otros objetos.
- Use cinturones de seguridad en los diferentes vehículos de motor.
- Utilice el equipo apropiado para la práctica de deportes de riesgo con el fin de proteger las zonas en donde son más frecuentes los hematomas, como almohadillas para los muslos, protectores de cadera y codos.
