MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Sólo el 10 por ciento de los musulmanes diabéticos que viven en España ha acudido a su médico antes de comenzar el Ramadán para controlar su tratamiento contra la enfermedad durante este mes de ayuno, uno de los cinco pilares de culto del Islam.
Así lo ha asegurado a Europa Press el médico de Familia del Centre de Salut Raval, Josep Franch, con motivo del comienzo, el pasado domingo, del Ramadán, un periodo en el que los musulmanes hacen, desde el alba y hasta la puesta de sol, un ayuno completo de ingesta de alimentos y bebida.
Todo ello hace que los pacientes diabéticos incrementen el riesgo de padecer una hipoglucemia que, de no tratarse puede conllevar serios problemas para la salud como, por ejemplo, pérdida de conocimiento o convulsiones.
Por este motivo, Franch ha destacado la importancia de que estos pacientes acudan 15 días antes de comenzar el Ramadán a su médico de cabecera para que les paute un tratamiento individualizado durante este periodo.
"Hay tantas diabetes como personas y no es lo mismo que un diabético tipo I o gestacional realice el Ramadán, a que lo haga otro de tipo II y con un peso controlado. Y es que, dependiendo de la sensibilidad de cada uno, el ayuno puede asociarse a las hipo o a las hiperglucemias, complicaciones que más preocupan a los profesionales sanitarios", ha recalcado.
Finalmente, el especialista ha destacado la necesidad de que estos pacientes aumenten el control de su glucemia capilar durante el Ramadán y ha informado de que deberá "romper" el ayuno en el caso en el que los niveles de glucemia capilar sean menores de 70 mg/dl o superiores a 180 mg/dl.