MADRID 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
La sintomatología difusa de la meningitis dificulta el diagnóstico precoz, ya que los síntomas iniciales de la meningitis son similares a los de la gripe como la fiebre o los dolores de cabeza. Así lo han destacado los participantes del Simposio 'Meningitis: manejo y vacunación', organizado por la Fundación Irene Megías Contra la Meningitis en el marco del 31 Congreso de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFyC).
Los signos más claros para un diagnóstico son la rigidez de la nuca, los vómitos o la erupción petequial, pero éstos no aparecen hasta una fase tardía de la enfermedad, entre las 13 y las 22 horas posteriores a los primeros síntomas.
Por eso, el médico de familia del Centro de Salud Las Calesas de Madrid, José Javier Gómez Marco, ha remarcado que es importante que los médicos de atención primaria, ante la alerta de una posible gravedad en el cuadro febril, remitan al paciente a urgencias. "La detección precoz de meningitis o sepsis puede resultar clave para la evolución del enfermedad", advierte.
Por su parte, la especialista del Servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, Magda Campins, ha comentado que "la vacunación sistemática infantil con la vacuna conjugada frente a la meningitis tipo C ha incidido en un avance importante para combatir esta enfermedad".
Aún así, Campins ha recordado que "en España cada año se detectan más de 10.000 pacientes con meningitis siendo, en un 80 por ciento de los casos, menores de 25 años". El colectivo más vulnerable ante la meningitis bacteriana y su variante más letal, la sepsis, son los niños y los adolescentes, pero los expertos aseguran que existen otros grupos en peligro como los adultos jóvenes, los mayores de 65 años y los viajeros.
GUÍA DE PRÁCTICA CLÍNICA
Por ello, la Fundación Irene Megías ha adelantado que editará la 'Guía de Práctica Clínica para la gestión de la enfermedad meningocócica invasiva'. "La idea es tratar de aportar un valor añadido al conocimiento de la enfermedad y mejorar la gestión de la misma, para reducir sus efectos adversos", asegura el presidente de la Fundación, Jorge Megías.
La OMS confirma que cada año se producen unos 500.000 casos de enfermedad meningocócica a nivel internacional y que entre el 5 y el 10 por ciento de las personas que la contraen fallecen, incluso tras un inmediato diagnóstico y tratamiento. Uno de cada cinco supervivientes sufrirá complicaciones de por vida como lesión cerebral, problemas de aprendizaje, pérdida auditiva o amputación de extremidades.
En España se registran cada año 12.000 casos de meningitis, de los cuales 2.000 son casos bacterianos y el resto son fundamentalmente víricos. Actualmente, la tasa de mortalidad de los pacientes con meningitis bacteriana es del 10 por ciento y, de los supervivientes, un 17 por ciento padecen secuelas severas.