MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La actividad física tiene múltiples beneficios para la salud y correr constituye una de las más útiles porque se ejercita casi todo el cuerpo y conlleva mejoras tambien a nivel mental.
La Organización Médica de la Salud recomienda al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada para las personas de 18 a 64 años, mientras que si se prefiere la actividad vigorosa la recomendación disminuye hasta los 75 minutos.
En el caso de correr, no sólo sirve practicarlo, sino que la elección del calzado es clave para la salud de los pies y el sistema locomotor. La razón es que "el impacto repetitivo que se produce sobre los miembros inferiores es mayor y más continuado", ha explicado la presidenta del Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV), Maite García.
El Colegio considera que, a la hora de elegir zapatillas, hay que tener en cuenta estas recomendaciones, e indica que las lesiones más frecuentes por no elegirlas bien son luxaciones, sobrecargas musculares, distensiones musculares, esguinces, tendinitis, ampollas, callos o pie de atleta.
- Realizar antes un estudio biomecánico y de la pisada. El primer paso es visitar al podólogo para que realice un estudio biomecánico completo así como de la pisada y pueda analizar si el apoyo que realiza el pie en el suelo es correcto o puede generar a la larga algún tipo de lesión por mal apoyo.
Hay que tener en cuenta que, en las carreras de larga distancia, el comportamiento del pie no es igual en los primeros kilómetros que cuando ya se ha realizado más de la mitad del recorrido. Debido a que la pisada va cambiando conforme va transcurriendo la carrera, un estudio de la pisada mostrará qué comportamiento tendrá el pie en momentos de más fatiga y así evitar que un apoyo incorrecto causado por el cansancio provoque una lesión.
El Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos incide en que sean los profesionales del pie los que realicen estos estudios, que "deben centrarse en el diagnóstico y no en la venta" de zapatillas. "Sólo un profesional sanitario como un podólogo puede realizar un diagnóstico certero", subrayan.
- Tener en cuenta las condiciones físicas y fisiológicas del corredor. El peso, la altura y si es hombre o mujer son factores a tener en cuenta a la hora de escoger el calzado de 'running'.
- Escoger bien la talla. El ICOPCV ha destacado que la pisada del corredor es diferente en cada momento de la carrera porque se fatigan las estructuras músculoligamentosas y, debido al movimiento repetitivo y que no hay tanto retorno sanguíneo, el pie se hincha y puede aumentar en media talla.
En caso de no tener esto en cuenta pueden causarse lesiones en las uñas, que llegan incluso a caerse e imposibilitan finalizar la carrera.
- Tener en cuenta el tipo de superficie para optar por un tipo de suela u otro. La mayoría de zapatillas tienen pequeños tacos para realizar una buena tracción o agarre. A mayor tamaño de taco, mayor será el agarre a la superficie.
En terrenos inestables, como en montaña, se aconseja utilizar tacos de mayor tamaño. No produce el mismo impacto en el aparato locomotor trabajar sobre superficies duras, blandas, deslizantes, tierra, asfalto o suelos sintéticos.
- Comprar las zapatillas después de caminar un rato para que los pies estén algo hinchados, similar a cuando se practica deporte.
- Es recomendable probarlas con el mismo tipo de calcetines con los que se realizará la actividad deportiva.
- Las zapatillas son personales y las que dan buen resultado a un deportista pueden no ser buenas para otro.
