La mayoría de las enfermedades tropicales se pueden prevenir
MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las infecciones son la primera causa de morbilidad al regreso de un viaje a un país tropical, representando hasta un 3 por ciento de la mortalidad de los turistas que visitan la zona, según la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), que recuerda que la mayoría de estas enfermedades son prevenibles.
La presentación de las infecciones importadas es diferente según el tipo de persona que la sufre. En viajeros que nunca se han puesto en contacto con éstos patógenos, la presentación puede ser más grave que en sujetos que viven en zonas endémicas o inmigrantes que no lleven mucho tiempo fuera de su país. El riesgo de adquisición puede incrementarse, la presentación ser atípica o la gravedad mayor.
El incremento en el número de viajeros --incluso de mayor riesgo como personas ancianas, enfermos crónicos o inmunodeprimidos--, sumado a los inmigrantes, ha hecho que las infecciones tropicales sean cada vez más frecuentes como motivo de consulta en la Atención Primaria, especializada y en las urgencias.
A diferencia de otros países, como Reino Unido, Bélgica o Francia, en España existen pocas unidades especializadas en enfermedades tropicales, que siguen siendo unas grandes desconocidas para la mayoría de los médicos de nuestro país, denuncia SEIMC.
Según el doctor Rogelio López Vélez, miembro de la SEIMC y especialista en Enfermedades Tropicales del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, lo recomendable antes de realizar un viaje a los trópicos es llevar a cabo "algunas medidas preventivas para evitar posibles contagios en el país de destino" y a la vuelta, es positivo acudir al médico "para detectar el posible desarrollo de cualquier enfermedad que no se haya manifestado durante el viaje".
ANTES DE VIAJAR
En concreto, antes de iniciar un viaje es aconsejable tomar fármacos preventivos si están indicados, frente a enfermedades como el paludismo, la patología importada grave más frecuente. Según datos de la Unidad de Medicina Tropical del Hospital Ramón y Cajal, entre 1989 y 2006, la mitad de las perofilaxis antimaláricas se realizaron de forma incorrecta o no se hicieron.
También recuerdan que vacunarse es "la mejor medida de prevención frente a determinadas enfermedades, como la fiebre amarilla". En este sentido, la SEIMC, destaca que, de los 2.993 viajeros atendidos entre 1989 y 2006, un total de 2.093 casos recibieron alguna vacuna antes de realizar su viaje. La de la fiebre amarilla, fue la vacuna más recibida (77,9% de los casos), seguida de la fiebre tifoidea (55,1%), el tétanos (40,7%) y las hepatitis B y A (40 y 31%, respectivamente).
También hay que seguir tomando los fármacos antipalúdicos durante todo el periodo prescrito, incluso tras la finalización del viaje; tener precaución al ingerir alimentos, ya que deben estar siempre bien cocinados; beber sólo agua embotellada o usar repelentes y ropa que cubra todo el cuerpo para evitar las picaduras de mosquitos.
LAS ENFERMEDADES MÁS COMUNES
La malaria o paludismo, una enfermedad transmitida por los mosquitos a través de la sangre, es la patología importada más relevante por su frecuencia y por su potencial morbimortalidad ya que supone el 2,3 por ciento de todas las enfermedades a nivel mundial y el 9 por ciento en África.
El 40 por ciento de la población mundial vive en zonas de riesgo de malaria --América Central y del Sur, República Dominicana, Haití, África, Asia central-sur, Sudeste asiático y Pacífico Sur-- y la prevalencia anual es de unos 500 millones de afectados.
La potencial gravedad de la malaria en viajeros radica en sui falta de inmunidad frente a la malaria, al no haber estado previamente en contacto con el parásito; la falta de experiencia de los médicos de zonas no endémicas como España, lo que retrasa el diagnóstico y el tratamiento; o el hecho de que se trate de una enfermedad importada, por lo que no siempre están disponibles los fármacos adecuados para el tratamiento.
Otras enfermedades que también son transmitidas debido a las picaduras de mosquito son el dengue y la fiebre amarilla, entre otras. Para la fiebre amarilla existen vacunas, pero para la mayoría de las infecciones transmitidas por mosquitos, como en el caso del dengue, no existen medidas específicas de prevención por lo que se recomienda seguir algunas normas preventivas generales.
CONTRA LOS MOSQUITOS, EVITAR EL PERFUME
El estímulo que atrae al mosquito es el olfatorio pero también el visual y el térmico. La temperatura y la humedad corporal, así como la secreción de monóxido de carbono y el ácido láctico atraen a los mosquitos, así como los jabones, perfumes y cremas, por lo que es conveniente evitar productos perfumados. Se deben usar repelentes de mosquitos y ropa de color claro que cubra hasta las muñecas y los tobillos.
Otras infecciones que pueden adquirirse en viajes a países tropicales son las de transmisión sexual, ya que en los viajes al extranjero son más frecuentes las relaciones con desconocidos y se suelen usar poco los preservativos. En este sentido, es "fundamental" la educación sanitaria de la población, según SEIMC.
Cerca de un millón de españoles viaja a algún país del trópico a lo largo del año, siendo el verano cuando unos 506.000 van a América Central-Caribe y Sur, 280.000 a África y 165.000 a Asia y Pacífico.
Según SEIMC, Se estima que, por cada 100.000 viajeros que visitan los trópicos, unos 50.000 tendrán algún problema de salud, 8.000 tendrán que acudir al médico durante su viaje, 300 serán hospitalizados durante su estancia o al regreso y uno fallecerá.