MADRID 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en Estados Unidos han secuenciado el genoma de un segundo paciente con leucemia mieloide aguda (LMA) y han descubierto nuevas mutaciones genéticas asociadas a la enfermedad.
La investigación, que se publica en la revista 'New England Journal of Medicine', revela que una de estas mutaciones también es común en ciertos cánceres cerebrales llamados gliomas y que otra se produce en un segundo paciente con el mismo tipo de leucemia. Se desconocía que ambas mutaciones estuvieran vinculadas a la leucemia.
Según los investigadores, el hecho de que estos errores genéticos se produzcan en ocasiones en otros pacientes sugiere que las mutaciones son relevantes para el desarrollo y la progresión del cáncer. Los autores apuntan que aunque estos descubrimientos no conduzcan al desarrollo de mejores tratamientos sí subrayan la importancia de secuenciar muchos genomas del cáncer para desvelar sus bases genéticas.
Gran parte de las mutaciones fueron descubiertas en largos fragmentos de ADN entre los genes en regiones del genoma que pueden influir en cómo funcionan los genes. Estas áreas no se conocen aún bien y sólo ahora están siendo vinculadas al cáncer.
El mismo equipo de científicos del trabajo actual realizó la primera secuencia de un genoma completo de un paciente de cáncer, una mujer con LMA que había muerto de la enfermedad. Esta investigación, publicada en 'Nature', demostró la viabilidad de decodificar el genoma de las células cancerígenas de un paciente y compararlo al genoma de las células sanas de un paciente normal para descubrir las mutaciones genéticas únicas de la enfermedad de la persona.
En el genoma del primer paciente los investigadores descubrieron un conjunto de mutaciones completamente diferente al descubierto ahora y ninguna de las nuevas mutaciones se descubrieron en otros 200 pacientes con LMA.
En el estudio actual los científicos secuenciaron el genoma de un hombre diagnosticado con LMA a los 38 años que había estado en remisión durante más de tres años. Su genoma se eligió porque el paciente tenía las características clínicas y moleculares típicas de la enfermedad, incluyendo las dos mutaciones asociadas a la LMA ya conocidas.
Los investigadores identificaron alrededor de 750 mutaciones en el genoma del paciente de LMA. Sin embargo, posteriores estudios indicaron que la mayoría de ellas eran aleatorias y no relevantes para el desarrollo de la enfermedad. Un trabajo posterior determinó la importancia de 64 mutaciones.
Doce de estas mutaciones estaban en genes que codificaban proteínas, incluyendo una mutación en el gen IDH1 que ha sido vinculado recientemente a los gliomas, y 52 mutaciones en fragmentos largos de ADN que no contienen genes pero que afectan a cuándo y cómo se expresan los genes más cercanos.
Los investigadores evaluaron 187 muestras adicionales de ADN de células de leucemia de pacientes de LMA para buscar estas 64 mutaciones. Descubrieron que la mutación IDH1 en 15 muestras, lo que la convierte en una de las mutaciones más comunes asociada a la LMA hasta la fecha. Otra mutación en la región no codificadora del genoma también se encontró en otro paciente, lo que sugiere también su importancia.