MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, con la colaboración de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) y a petición de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), ha elaborado una guía para ayudar a los profesionales sanitarios de Atención Primaria a detectar a aquellas mujeres que tengan implantado el anticonceptivo 'Essure' (Bayer) y que puedan sufrir alguna complicación como, por ejemplo, infecciones, dolores (articular y muscular), inflamación del estómago o hemorragias.
Hasta la fecha, alrededor de 80.000 mujeres se han implantado este dispositivo anticonceptivo, de las cuales, según datos de la AEMPS, unas 900 han sufrido algún tipo de complicación. Por este motivo, y después de las numerosas quejas que se han producido por parte de las afectadas, el Ministerio y la SEGO han elaborado el protocolo para mejorar la asistencia que se presta en los centros de salud y en los servicios de Ginecología a las mujeres afectadas.
"El objetivo es que todo el Sistema Nacional de Salud conozca lo que está sucediendo y que cuando aparezcan las mujeres en las consultas se sepa cuáles son los síntomas de las complicaciones y se pueda derivar al especialista con total naturalidad", ha explicado la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, antes de entrar en una reunión con la Plataforma Libres de Essure y la Asociación de Afectadas por Essure.
En concreto, en la guía se facilita información a las usuarias que refieran efectos adversos, proporciona las pautas de extracción con las máximas garantías de seguridad en el procedimiento de retirada y la realización de un seguimiento "adecuado" mediante las oportunas revisiones posteriores.
Se trata de una actualización de la ya publicada por la SEGO en 2016, en la que se incorpora a todas las portadoras e incluye los síntomas alérgicos a valorar en Atención Primaria. Del mismo modo, añade la derivación a servicios de alergia, si persisten los síntomas, la realización de TAC en revisiones si no se detectara el dispositivo por ecografía transvaginal y radiografía abdominal.
"La guía facilita el abordaje de esta complicación por la experiencia acumulada de las mujeres que han padecido complicaciones con este dispositivo. Por eso, quiero realizar un llamamiento a todas las mujeres para que acudan a Atención Primaria si notan algo y que estén tranquilas porque van a ser tratadas perfectamente", ha apostillado Carcedo.
UN "GRAN PASO" Y "MUY POSITIVO" PARA LAS PACIENTES
La guía ha sido bien acogida por parte de las asociaciones de pacientes, quienes lo han calificado como un "gran paso" y "muy positivo" ya que incluye algunas de sus principales demandas como, por ejemplo, que en el momento de la operación para la extracción del implante se pueda realizar una radiografía con el fin de comprobar si ha quedado, o no, algún fragmento del implante en la paciente.
"Cuando entrábamos al quirófano nos operaban sin hacernos pruebas como, por ejemplo, una radiografía o un TAC, por lo que nos intervenían a ciegas. El 'Essure' se ha demostrado que puede emigrar y, de hecho, muchas chicas han tenido retos en el útero o en oros órganos, por lo que con el tiempo han sufrido muchos efectos secundarios y han tenido que volver a ser intervenidas", ha comentado Susana Vázquez, paciente y representante de la Plataforma Libres de Essure, quien ha informado de que su organización tiene registradas más de 1.700 casos de mujeres afectadas.
Del mismo modo se ha pronunciado la representante y también paciente de la Asociación de Afectadas por el Essure, Angélica del Valle, quien ha agradecido a Carcedo que se haya reunido con ellas para mostrarles la guía y ha destacado la importancia de la misma porque permitirá que tanto los médicos de Atención Primaria como los ginecólogos sepan a qué se enfrentan cuando una mujer está teniendo problemas con el 'Essure' y cómo retirarlo correctamente y con el menor riesgo para la paciente.
"Son muchísimas mujeres las que han sufrido los efectos de que los médicos desconocieran el producto y no supieran identificar los síntomas adversos, por lo que les derivaban a los servicios de traumatología, digestivo en lugar de al ginecólogo. Además, muchas han sufrido el desconocimiento de los médicos a la hora de retirar el dispositivo, por lo que han tenido fragmentos en el útero y en la cavidad abdominal que les ha hecho tener que volverse a operar. Por tanto, acogemos esta guía como algo muy positivo porque era completamente necesaria", ha zanjado.