MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Un informe de Naciones Unidas y la Universidad de Washington (Estados Unidos) ha revelado que por cada 4.205 dólares, unos 3.700 euros, que se invierten en programas sanitarios para la infancia se consigue salvar la vida de un niño, si bien el coste es mayor en función de los ingresos de cada país.
Así se desprende de un análisis del Enviado Especial de Naciones Unidas para la financiación de los Objetivos de Salud del Milenio y para la Malaria y el Instituto para la Métrica de Salud y Evaluación (IHME) cuyos resultados publica en su último número la revista 'The Lancet', que muestra como desde el año 2000 se han salvado más de 34 millones de vidas en edad pediátrica gracias a inversiones públicas y privadas, principalmente en programas de nutrición, vacunas y Atención Primaria.
El análisis se basa en un trabajo de colaboración internacional de investigadores que, por primera vez, crea un cuadro que cuantifica las muertes infantiles que se han evitado gracias a las inversiones de gobiernos locales y organismos públicos y privados en salud infantil, de cara a predecir lo que cuesta prevenir cada fallecimiento.
De este modo, han visto que entre los años 2000 y 2014 los gobiernos de países de bajos y medianos ingresos gastaron 133.000 millones de dólares (unos 119.000 millones de euros) en salud infantil, a los que habría que sumar otros 73.600 millones de dólares (unos 66.000 millones de euros) procedentes de donaciones públicas y privadas, en su mayoría procedentes de países más ricos.
En virtud de esta inversión y del cálculo realizado, estiman que los gobiernos locales salvaron a aproximadamente 20 millones de niños de sus propios países, mientras que los donantes lograron que otros 14 millones de niños más siguieran vivos.
EE.UU., REINO UNIDO Y BILL GATES, LOS QUE MÁS VIDAS SALVAN
Así las cosas, el Gobierno de Estados Unidos, por ejemplo, salvó la vida de 3,3 millones de niños menores de 5 año, mientras que el Gobierno británico salvó a 1,7 millones de menores. Tras ellos, según el análisis, estaría la Fundación Bill y Melinda Gates, que salvó 1,5 millones de vidas.
Además, muchas de las donaciones públicas y privadas se canalizan a través de diversas iniciativas, según muestra el análisis, ya que la alianza Gavi (centrada en el mundo de las vacunas) consiguió que sobrevivieran unos 2,2 millones de niños, mientras que otras instituciones como el Banco Mundial, UNICEF y o el Fondo Mundial salvaron a más de 1 millón de niños cada uno.
"Se pueden gastar 4.000 dólares en muchas cosas, pero hay muy pocos destinos en los que el dinero tendrá el impacto que se obtiene al invertir en salud infantil", ha reconocido Christopher Murray, director del IHME.
A MÁS RIQUEZA, MÁS CARO SALVAR VIDAS
No obstante, los autores del trabajo encontraron que para salvar la vida de un niño el coste se incrementa en función de los ingresos del país, ya que también son más caras las intervenciones necesarias para salvar su vida.
Así, mientras que los 4.000 euros por niño serían suficientes en países de bajos ingresos como Tanzania o Haití, el coste asciende hasta los 6.496 dólares (unos 5.700 euros) por mayor en países de ingresos medios y bajos como la India y Zambia, y de hasta 10.016 dólares (unos 9.000 euros) en países de ingresos medios como Botswana y Tailandia.
El IHME y Naciones Unidas confían que estos cálculos se vayan actualizando cada año para poder seguir midiendo los efectos de sus inversiones para incentivar el progreso y reducir la brecha entre unos países y otros.
De hecho, uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio pasaba por reducir la tasa de mortalidad en niños menores de 5 años en dos tercios en todos los países entre 1990 y 2015, algo que ya han conseguido incluso algunos países de bajos ingresos.