MADRID, 31 Oct. (Reuters/EP) -
Los sacos de dormir para bebés reducen significativamente el riesgo de muerte súbita del lactante, según ha puesto de manifiesto una revisión de estudios llevada a cabo por investigadores del Royal United Hospitals (Reino Unido) y que ha sido publicada en la revista 'Archives of Disease in Childhood'.
Si bien se sabe poco acerca de la muerte súbita en los lactantes, se ha encontrado en diversos estudios que determinados factores pueden originarla como, por ejemplo, poner a un bebé a dormir boca abajo o usar ropa de cama suave.
Los sacos de dormir son una especie de bolsas sin mangas que cubren los hombros, que contienen el resto del cuerpo y que dejan los brazos del bebé fuera para evitar que intente levantarse impulsándose con la cabeza. Con el fin de comprobar su seguridad, los expertos analizaron cuatro estudios realizados en bebés de Australia, Holanda, Mongolia y Reino Unido.
Dos de los estudios trabajos analizaron el efecto de los sacos de dormir infantiles en relación al riesgo de muerte súbita, y los otros dos tuvieron en cuenta la temperatura a la que se encontraba durante la noche el bebé.
Así, el estudio holandés, publicado en 1998, encontró que los sacos de algodón para dormir redujeron el riesgo de muerte súbita en el lactante en un 65 por ciento y que los bebés que los llevaban tenían menos probabilidades de girarse boca abajo o boca abajo.
Asimismo, la investigación inglesa descubrió que los sacos de sueño disminuían el riesgo de muerte súbita en los bebés, si bien cuando se tuvieron en cuenta otros factores, no aseguraron que la reducción de dicho riesgo se debía al uso de los sacos de dormir.
Por otra parte, el estudio austriaco descubrió que los bebés se mantenían igual de calientes cuando dormían en sacos de dormir que cuando estaban envueltos en mantas, y el trabajo en bebés mongoles encontró temperaturas corporales similares en bebés que llevaban sacos para dormir o que dormían con mantas.
"Los estudios revisados son excelentes, pero hay pocos y algunos de ellos son pequeños. La conclusión general es que existe cierta evidencia de que estos sacos de dormir son seguros cuando se usan correctamente, y al menos alguna indicación inicial de que podrían ayudar a prevenir el riesgo de muerte súbita", han zanjado los expertos.