MADRID 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un estudio británico ha desvelado que dos variantes genéticas hacen a unas personas más sensibles a desarrollar meningitis meningocócica y septicemia, así como otras enfermedades naturalmente inmunes.
La investigación, liderada por el Imperial College de Londres y el Instituto de Genoma de Singapur y publicada en 'Nature Genetics', se trata del mayor estudio sobre estas enfermedades hasta la fecha, en el que se ha comparado el mapa genético de 1.500 personas que desarrollaron meningitis meningocócica --procedentes del Reino Unido, Holanda, Austria y España-- con otros 5.000 casos sanos.
Los resultados del estudio han mostrado que las personas que sufrieron estas enfermedades cuentan con diferencias genéticas innatas en sus defensas naturales que les incapacitan para luchar con éxito contra la bacteria meningococcal, causante de la meningitis y la septicemia.
De este modo, los investigadores han descubierto variaciones genéticas en los genes del factor H, así como en sus proteínas asociadas, reguladores del sistema Complemento, fundamental en el sistema inmunitario.
La bacteria meningocócica consigue atacar este factor, de forma que el cuerpo no reconoce a la bacteria como una intrusa, así utiliza este factor como un 'caballo de troya', inhabilitándolo para evadir las defensas humanas.
SOLO 1 DE CADA 40.000 DESARROLLAN LA ENFERMEDAD, AUNQUE ES NORMAL PORTAR LA BACTERIA
Uno de los líderes del estudio, el doctor Michael Levin, del departamento de Pediatría del Imperial College, ha explicado que "a pesar de que la mayoría de las personas se infecta por esta bacteria alguna vez en su vida, solo 1 de cada 40.000 desarrolla la enfermedad".
Por ello, uno de los objetivos del estudio era averiguar por qué algunas personas acaban sufriendo meningitis y otras parecen ser naturalmente inmunes a la bacteria. Con estos resultados "se aportan evidencias de el factor genético resulta determinante en este aspecto", ha afirmado.
Los investigadores se centran ahora en conocer de forma precisa cómo estas variantes genéticas descubiertas afectan a la actividad del factor H y sus proteínas.
Aunque existen múltiples bacterias y virus que provocan la meningitis, esta bacteria es la responsable de una de las formas más agresivas de la enfermedad, la meningitis meningocócica, que es mortal en uno de cada diez casos. Por otra parte, la septicemia meningocócica se trata de una infección sanguínea que acompaña a veces a esta enfermedad.
Esta enfermedad afecta principalmente a bebés, niños pequeños, adolescentes y jóvenes, de una forma muy agresiva, entrando en estado crítico rápidamente. Actualmente, existen vacunas contra algunas de las formas de esta bacteria, pero no para otras, por lo que los investigadores confían en poder lanzar una que sea efectiva contra las del grupo B, para la cual no existe una, pero se trata de una de las causantes de miles de muertes en adultos y niños en todo el mundo.