MADRID 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido, han conseguido desarrollar células madre a partir de una simple muestra de sangre de un paciente para generar vasos sanguíneos, según los resultados que publica en su último número la revista 'Stem Cells Translational Medicine'.
Las células madre son una de las grandes esperanzas de la investigación biomédica, ya que pueden transformarse en cualquier tipo de célula del organismo y, como tales, pueden ser capaces de reparar cualquier órgano, desde el cerebro al corazón, los ojos y huesos.
Una de las fuentes de células madre son los embriones, pero estos están rodeados de controversia ética. Además, como estas células no pertenecen al paciente el sistema inmune puede rechazarlas de la misma forma que sucede con un trasplante.
Sin embargo, y al igual que estudios previos ya habían demostrado que es posible extraer células de la piel de un adulto y convertirlas en células madre, los autores de este estudio analizaron muestras de sangre y encontraron un tipo de célula que recorre la corriente sanguínea reparando cualquier daño que encuentra en las paredes de los vasos.
Estas células fueron posteriormente convertidas en células madre y, como ha reconocido a la BBC el doctor Amer Rana, uno de los investigadores principales, este método es mejor que tomar muestras de la piel.
"Estamos muy emocionados porque desarrollamos un método práctico y eficiente para crear células madre de un tipo de célula que se encuentra en la sangre", afirmó el investigador.
El siguiente paso, dado que parecen "bastante estables", será intentar crear células "de grado clínico" con las que ver si puede tener algún tipo de aplicación práctica.
El profesor Chris Mason, experto en Medicina Regenerativa de la Universidad de Londres, afirmó que en el laboratorio de Cambridge se está llevando a cabo "un trabajo magnífico". "Es extraordinariamente más sencillo obtener una muestra de sangre que una muestra de piel de alta calidad, así que esto es un enorme beneficio", aseguró el científico.
Sin embargo, recuerda que se trata de células que "todavía son muy nuevas" y, por tanto, se necesita "mucha más experiencia para poder reprogramar totalmente una célula de forma que sepamos que es segura".