MADRID 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Cancer Research UK y el Instituto del Cáncer del University College London, en Reino Unido, han descubierto que el cáncer crea un caos en su código genético que es lo que le permite multiplicarse, según informan en un artículo en la revista 'Nature'.
La mayoría de las células del cuerpo humano tienen 46 cromosomas pero, en cambio, algunas células cancerígenas pueden tener más de 100 cromosomas. Este un patrón, sin embargo, es inconsistente ya que cuando se analiza un grupo de células de una misma región cada una de ellas podría tener un conteo de cromosomas distinto.
Dicha diversidad es precisamente lo que permite que los tumores se adapten para ser intratables y puedan colonizar otras partes del cuerpo, según han explicado los autores a la BBC.
De este modo, y durante una investigación para tratar de buscar respuestas a la diversificación de los tipos de cáncer, comprobaron que en el caso del cáncer de colon hay "muy pocas evidencias" de que cuando una célula cancerosa se divide para crear células nuevas los cromosomas no se dividieran en partes iguales.
Según ha explicado Charles Swanton, uno de los autores del estudio, lo que se observó fue que el problema se originaba en las copias del código genético del cáncer.
Los cánceres están motivados a hacer copias de ellos mismos. Pero cuando las células cancerígenas agotan la materia prima de su ADN, desarrollan lo que llaman "estrés de réplica de ADN".
En este sentido, el estudio mostró que este estrés las lleva a cometer errores y a la diversificación de tumores. "Es como construir un edificio sin ladrillos ni cemento suficiente para sus cimientos", ha explicado Swanton.
"No obstante, si puedes suministrar materia prima de ADN, puedes reducir el estrés en la duplicación para limitar la diversificación de tumores, lo que puede ser terapéutico", ha añadido.
El especialista admitió que "parece sencillamente incorrecto" proveer con fines terapéuticos combustible a un cáncer para que crezca.
HERRAMIENTAS PARA COMBATIR EL ESTRÉS
Sin embargo, señaló que esta técnica ha probado que el problema era el estrés en la duplicación y que se pueden desarrollar nuevas herramientas para atacarlo.
Además, Swanton y su equipo identificaron tres genes que normalmente se pierden en la diversificación de las células de cáncer intestinal, lo que era crítico para el cáncer sufriendo de estrés en la duplicación de ADN. Todos fueron localizados en una región del cromosoma 18.
Esta región, según ha explicado Nic Jones, del Cancer Research UK, está "perdida" en muchos cánceres, "lo que sugiere que este proceso no es único al cáncer de colon".
"Ahora los científicos pueden empezar a buscar formas de prevenir que este desorden ocurra o en hacer que esa inestabilidad se vuelva en un factor en contra de los cánceres".