Foto: ALEX DE ITHACA
MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Commonwealth de Virginia, en Estados Unidos, aseguran que la vulnerabilidad a las drogas y la consiguiente adicción puede estar condicionada por la genética y, por tanto, ser hereditaria, según los resultados de un estudio publicado en el último número de la revista 'Archives of General Psychiatry'.
La investigación se centró en el riesgo del uso indebido de drogas en 18.115 niños adoptados para analizar la importancia de los factores genéticos y ambientales asociados.
Para ello, se basó en los registros de adopción y bases de datos de salud de Suecia, así como en la información existente acerca del abuso de drogas de los registros médicos, legales o de farmacia, observando que el riesgo de dependencia de sustancias es mayor entre los niños adoptados cuyos padres biológicos tenían antecedentes de este tipo.
En concreto, y según ha explicado el investigador Kenneth S. Kendler, autor de este trabajo, "las personas adoptadas, nacidas entre 1950 y 1993, tuvieron una prevalencia del 4,5 por ciento de consumo de drogas, en comparación con el 2,9 por ciento en toda Suecia".
Sin embargo, cuando alguno de sus padres biológicos había consumido drogas, la cifra se elevaba hasta el 8,6 por ciento.
El riesgo del consumo en los niños adoptados se incrementa cuando existen antecedentes en los padres biológicos y hermanos no solo de drogas, sino también de alcoholismo, enfermedad psiquiátrica muy grave y condenas penales.
"En los niños adoptados se incrementa el riesgo por la ruptura de la relación entre padre adoptivo e hijo adoptado por muerte o divorcio", sostiene el investigador en declaraciones al Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC), recogidas por Europa Press.
Asimismo, también hay una serie de índices que muestran "un ambiente adoptivo familiar perturbado o las influencias del alcoholismo de los padres y el abuso de drogas entre hermanos", continúa.
Los investigadores también sugieren una interacción entre genes y medio ambiente como posibles causas del abuso de drogas, ya que "los niños adoptados con alto riesgo genético son más sensibles a los efectos patógenos de los ambientes familiares adversos que los que poseen un riesgo genético bajo".
"En otras palabras, los efectos genéticos sobre el consumo de drogas son menos potentes en los entornos de bajo riesgo que en los de alto riesgo", concluyeron los autores.