La "tensión" en la sociedad repercute en los profesionales asistenciales, dicen los psicólogos
BARCELONA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El riesgo de mala salud mental es más del doble en los profesionales de la salud catalanes respecto al conjunto de la población, y en el caso de los estudiantes de medicina incluso se multiplica por seis, llegando a un 43,85% de media entre hombres y mujeres, frente al 7% en torno al que se sitúa el resto de población, según datos de la Fundación Galatea y la Encuesta de Salud de Cataluña (Esca).
El director de la Fundación Galatea, Antoni Calvo, ha explicado en este viernes que el riesgo se sitúa en cerca del 20% en pediatras, odontólogos, psicólogos y médicos --de entre 30 y 55 años, una vez superado el estrés del estudio y las residencias--, ha detallado este viernes en rueda de prensa de presentación de un estudio sobre psicólogos.
El riesgo de mala salud mental en enfermeras es superior, alrededor del 36%, y Calvo ha explicado que se trata de estudios realizados en los colectivos con los que trabaja la fundación a lo largo de los años, y que en farmacéuticos se registró en un 35%, lo que ha vinculado a que la encuesta se hizo en 2015, coincidiendo con problemas de financiación pública.
SITUACIÓN EN CATALUÑA
Preguntado por el impacto que ha tenido en los profesionales y la población la situación actual en Cataluña, tanto la de cariz político como los atentados terroristas de agosto, Calvo ha explicado que los profesionales de la salud son permeables y la "tensión" que se percibe les afecta --como hizo la crisis económica--.
Lo demuestra el hecho de que se incrementa cada vez más la demanda de participar en programas de apoyo psicológico de la fundación por parte de profesionales de la salud, y esta demanda es cada vez "más indefinida" y no se concreta en razones laborales como hacían anteriormente.
Ha dicho que esta indefinición lleva a deducir que está relacionado con cierta presión que se vive en todos los ámbitos sociales, y que se plantean añadir preguntas sobre la situación actual en los próximos estudios --como el que realizarán a fisioterapeutas--, y ha añadido que el conseller de Salud cesado, Toni Comín, afirmó que subió la demanda en salud mental después del referéndum.
SALUD EN PSICÓLOGOS
En la rueda en el Colegio Oficial de Psicología de Cataluña (Copc), Calvo ha presentado el 'Estudio sobre salud, estilos de vida y condiciones de trabajo de los psicólogos de Cataluña', junto a la vicesecretaria del colegio, Dolors Liria, y la coordinadora de programas de la fundación, Anna Mitjans.
El estudio recoge que el 91% considera que tiene buena salud física, y que la posibilidad de tener problemas de salud mental disminuye con la edad en este colectivo, ya que en los menores de 35 años este riesgo afecta al 27,7% de los profesionales, que disminuye en los mayores de 55, con 13,5%, han explicado Liria.
El 61,6% de los psicólogos declara sufrir como mínimo una enfermedad crónica --más los hombres que las mujeres, con un 54,4% y un 47,2% respectivamente--, mientras que los trastornos depresivos o de ansiedad son superiores en mujeres (9,3%) que en hombres (5,6%), y presentan una prevalencia superior en menores de 35 años (11,1%).
Esta prevalencia mengua con la edad --y es del 6,8% en mayores de 55 años--, a diferencia de lo que ocurre con la población general, y Mitjans ha remarcado que estos problemas de depresión y ansiedad se encuentran "muy por debajo" de otros profesionales, como los farmacéuticos (21%), las enfermeras (18%) y los médicos (14%).
El 10% de los profesionales de psicología toma algún tipo de psicofármacos, y Calvo ha explicado que la posibilidad de usar este tipo de fármacos es mayor en colectivos que los tienen al alcance y pueden recurrir a estos en caso de estrés y sufrimiento emocional, como médicos, psiquiatras, farmacéuticos y anestesistas.