MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
La restricción calórica mejora las respuestas metabólicas e inmunitarias que ayudan a determinar tanto la duración de la vida de una persona como el número de años de buena salud que disfruta, según un nuevo estudio del Pennington Biomedical Research Center (Estados Unidos).
"Dos años de restricción calórica modesta reprogramaron las vías de las células grasas que ayudan a regular el modo en que las mitocondrias generan energía, las respuestas antiinflamatorias del organismo y, potencialmente, la longevidad. En otras palabras, la restricción calórica reconfigura muchas de las respuestas metabólicas e inmunitarias que potencian la vida y la duración de la salud", afirma el doctor Eric Ravussin, líder del trabajo, que se ha publicado en la revista científica 'Science'.
El nuevo estudio utilizó los datos recogidos por el estudio CALERIE 2 (Evaluación Integral de los Efectos a Largo Plazo de la Reducción de la Ingesta de Energía) de Pennington Biomedical, el ensayo de restricción calórica más largo realizado en humanos.
El estudio descubrió que las personas que redujeron su consumo de calorías en aproximadamente un 14 por ciento a lo largo de dos años generaron más células T, que desempeñan un papel clave en la función inmunitaria y ralentizan el proceso de envejecimiento.
"A medida que las personas envejecen, sus timos se encogen y producen menos células T. En consecuencia, a las personas mayores les resulta más difícil combatir las infecciones y ciertos tipos de cáncer. La restricción calórica ayuda a evitar que el timo se reduzca para que la persona genere más células T", apunta otro de los autores, Eric Ravussin.
Además de mejorar la inmunidad, el aumento de las células T se asocia a una mayor capacidad de quemar las reservas de ácidos grasos para obtener energía. Esto es importante porque si una persona no quema este combustible, la grasa puede acumularse en órganos como el músculo y el hígado, lo que conduce a la resistencia a la insulina, la obesidad, la diabetes de tipo 2 y el envejecimiento.
El estudio contiene otro hallazgo importante: un posible tratamiento para reducir la inflamación relacionada con la edad y mejorar la salud metabólica.
Los estudios han demostrado que restringir las calorías en un 40 por ciento en roedores prolongaba su vida. Sin embargo, se produjeron contrapartidas en el crecimiento, la reproducción y la inmunidad.
Sin embargo, la restricción calórica también reduce los niveles del gen que codifica la acetil hidrolasa del factor activador de las plaquetas (PLA2G7). La reducción de PLA2G7 produce beneficios para la salud que incluyen la disminución de la inflamación relacionada con la edad y la mejora de la salud metabólica.
"Si los investigadores logran encontrar una forma de aprovechar el PLA2G7, podrían crear un tratamiento para prolongar la duración de la salud de una persona, es decir, el tiempo que un individuo experimenta una buena salud", concluye el director ejecutivo de Pennington Biomedical, el doctor John Kirwan.