MADRID 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los azúcares, necesarios en cantidades moderadas, pueden convertirse en veneno si alcanzan niveles elevados en la sangre, según se desprende entre las conclusiones de una investigación llevada acabo por investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) de Madrid.
Los investigadores han descubierto las claves moleculares que aumentan la actividad de una proteína llamada B-catenina, íntimamente relacionada con la progresión tumoral, e identifican a los niveles altos de azúcares como estímulos responsables de su actividad.
El estudio, publicado en 'Molecular Cell', explica como la obesidad y la diabetes predisponen a padecer cánceres y desvela los cambios inducidos en la B-catenina por los excesos de azúcar y las enzimas responsables para que aumente nuestro riesgo de padecer cáncer.
"Los resultados nos sorprendieron porque implican que los cambios metabólicos promovidos por la dieta impactan directamente sobre nuestro riesgo de padecer cáncer. Este hallazgo abre nuevas perspectivas de investigación sobre qué otros componentes de la dieta pueden modular nuestro riesgo de cáncer", ha explicado la investigadora principal del estudio, la doctora Custodia García Jiménez.
Al hallarse mecanismos moleculares por los que los altos niveles de azúcar anormales aumentan la proliferación celular, destacan que podría servir para buscar nuevas vías para el desarrollo de estrategias terapéuticas, o de prevención, encaminadas a reducir el riesgo de cáncer en la población.
"La dieta es una de las formas más fáciles y baratas de prevención que puede ahorrar mucho sufrimiento y dinero al Sistema Nacional de Salud", asegura García-Jiménez, investigadora principal en este trabajo.