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MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Los hijos de mujeres infectadas con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) tienen un sistema inmune debilitado, según sugiere un estudio del Colegio Imperial de Londres (Reino Unido) que se publica en la revista 'Journal of the American Medical Association' (JAMA).
En un estudio que incluía a bebés de Sudáfrica, aquellos que estaban expuestos en el nacimiento al VIH pero no se infectaban tenían menores niveles de anticuerpos para enfermedades como la tos ferina, el tétanos y el pneumococo, en comparación con bebés de madres no infectadas por el VIH.
Las enfermedades infecciosas son las responsables de casi 6 millones de muertes en todo el mundo cada año en niños menores de 5 años. La inmunización contra infecciones evitables mediante vacunación es esencial para reducir la mortalidad infantil.
Los científicos, dirigidos por Christine E. Jones, estudiaron la asociación de la infección por VIH maternal con los niveles de anticuerpos específicos del bebe para la gripe hemofílica tipo b (Hib), el pneumococo, antígenos de la tos ferina, el tétanos y la hepatitis B. El estudio se realizó en Sudáfrica entre marzo de 2009 y abril de 2010 e incluyó a 109 mujeres infectadas y no infectadas y a sus hijos. Se recopilaron muestras de suero de 104 mujeres y 100 niños en el nacimiento y muestras de 93 bebés a las 16 semanas, y se midieron los niveles de anticuerpos específicos.
Los autores descubrieron que en el nacimiento, los bebés no infectados expuestos al VIH tenían niveles más bajos de anticuerpos específicos en comparación con los bebés no expuestos para Hib, tos ferina, pneumococo y tétanos. De forma similar, una proporción más pequeña de estos bebés tenían niveles de anticuerpos destinados a ser protectores.
Para investigar los mecanismos asociados con la respuesta infantil, los investigadores midieron los niveles de anticuerpos maternales específicos: las mujeres infectadas por VIH tenían los niveles más bajos en comparación con las no infectadas en Hib y pneumococo y no mostraban claras diferencias en tos ferina o tétanos.
Los investigadores también descubrieron que los bebes no infectados expuestos al virus tenían respuestas de anticuerpos más fuertes tras la vacunación y respuestas de anticuerpos más elevadas a la tos ferina y el pneumococo.
Los autores señalan que a pesar de la imposibilidad de correlacionar los niveles de respuestas de vacunación a largo plazo o resultados clínicos en mujeres y niños, los datos contribuyen a explicar la mayor morbilidad y mortalidad entre los niños africanos expuestos al VIH. Concluyen que los datos subrayan la necesidad de estudios más grandes para determinar si los niveles de anticuerpos menores en los bebés expuestos en el nacimiento se trasladan a la mayor morbilidad de infecciones evitables con la vacunación.