LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Hemodonación y Hemoterapia del Servicio Canario de la Salud (SCS) ha desmontado mitos como que las personas que tengan tatuajes, las que hayan viajado a determinados destinos o las que estén siguiendo algún tratamiento que requiera medicación no pueden donar sangre.
Así lo ha indicado la Consejería de Sanidad, que recuerda que para ser donante hay que cumplir unos requisitos indispensables como tener entre 18 y 65 años (hasta 60 si es su primera donación), pesar más de 50 kilos, gozar de buena salud general y no estar embarazada.
De igual modo, con el objetivo de resolver cualquier duda, la Dirección General de Hemodonación y Hemoterapia cuenta con un teléfono gratuito de atención al donante, el 900 234 061.
En cuanto a los mitos más comunes sobre la donación de sangre, el SCS explicó que las personas con tatuajes sí pueden donar sangre siempre y cuando hayan pasado, al menos, cuatro meses desde su realización.
Además, otro de los mitos más comunes es la imposibilidad de donar sangre después de viajar a determinados destinos. En este caso, depende de la zona visitada y de las normativas sanitarias vigentes, por lo que este requisito se actualiza de forma frecuente.
Por ello, los profesionales de Hemodonación y Hemoterapia informan en el momento de la donación de los destinos con restricciones.
En la actualidad, si se han visitado países con alto riesgo de contagio de enfermedades como la malaria se debe esperar cuatro meses antes de donar sangre. Por otra parte, este año se eliminó la restricción respecto a la enfermedad de Creutzfeldt-Jacob, conocida como la enfermedad de las vacas locas, que ha afectado durante años a los donantes que vivían en el Reino Unido.
Mientras, otra creencia extendida es la de no poder donar sangre cuando se está siguiendo algún tratamiento que requiere medicación, por lo que el SCS destacó que no todos los fármacos excluyen a la hora de donar sangre, es el caso, por ejemplo, de los antibióticos.
Finalmente, los pacientes que siguen tratamientos crónicos para enfermedades como la hipertensión o la diabetes también pueden donar sangre, siempre y cuando las patologías estén controladas.