¿Cómo puede influir el parto en la lactancia?

El número de madres que apuestan por la lactancia.
El número de madres que apuestan por la lactancia. - ISTOCK - Archivo
Actualizado: lunes, 10 agosto 2020 12:23

   MADRID, 11 Dic. (EDIZIONES) -

   El ser humano es mamífero y, como tal, lo normal es que tras el alumbramiento dé de mamar a sus crías. Eso sí, esto no siempre es posible, o mejor dicho, igual de fácil para todas las mujeres. Cuando el parto ha sido manipulado, la fase siguiente, que es la lactancia, puede verse afectada de múltiples formas.

   Desde la Asociación Española de Consultoras Certificadas en Lactancia Materna (IBCLC, por su siglas en inglés) recuerdan que "cuanto más fisiológico y menos intervención se realice durante el momento del alumbramiento, más fácil será el establecimiento de la lactancia materna".

   Mientras, la plataforma 'El parto es nuestro' (asociación sin ánimo de lucro formada por usuarios y profesionales para mejorar las condiciones de atención a madres e hijos durante el embarazo, parto, y posparto en España) resaltan que "es un hecho" que el parto influye en el establecimiento de la lactancia, a la vez que considera que, cuanto menos intervenido sea un alumbramiento, hay más probabilidades de que la lactancia se desarrolle sin dificultades.

   "Podemos disfrutar de una lactancia feliz desde el primer momento, a pesar de haber vivido un parto muy intervenido o una cesárea. De la misma manera, es posible tener problemas para amamantar tras un parto respetado, tranquilo y maravilloso", señala.

   No obstante, Inma Marcos, comadrona e IBCLC sostiene en una entrevista con Infosalus que, por defecto, hay que estar siempre tranquila porque los partos suelen ir bien. "Las mujeres han nacido para parir, por lo que cuanto menos se manipulen estos, siempre que no haya necesidad, más probabilidades habrá de que todo vaya bien", celebra.

   La también secretaria y asesora de Alba Lactancia Materna, y secretaria de la Federación Catalana de Grupos de apoyo a la lactancia materna, recuerda que en los partos la mortalidad materna es baja pero la morbilidad es muy alta, es decir, las madres resultan dañadas, lesionadas o enfermas, con muchos puntos, y muchas técnicas invasivas sobre su cuerpo. "Cuando tu realizas acciones sobre una mujer que está de parto, siempre éstas tendrán sus efectos secundarios", aprecia la asesora de lactancia.

   A nivel físico, cuando una madre ha tenido un parto medicalizado reconoce que es más difícil ponerse a cuidar de su criatura, básicamente porque no se encuentra bien. "Cuanto más indemne sale una mujer de su parto, más fuerzas tiene para cuidar del bebé y dar la teta. Tras una cesárea, estás tirada en la cama y necesitas ayuda para ponerte bien sentada, tienen que ponerte al niño en la teta muchas veces porque no puedes levantarte. Ese bebé mamará menos veces seguramente", indica Marcos.

   Cuando te ponen la anestesia epidural dice también que te hidratan vía intravenosa "en exceso" para prevenir la hipotensión. "Ese líquido provoca que estas mujeres luego tengan unas subidas de leche muy aparatosas, que haya un mayor edema en los pechos, que luego puede también dificultar más la lactancia", puntualiza.

   Desde Alba Lactancia Materna avisan de que no tiene nada que ver empezar una lactancia después de un parto natural, libre de cables, sondas y sueros, que hacerlo inmovilizada por la epidural. "El parto medicalizado también disminuye la autoestima y la confianza de las mujeres en su propio cuerpo. Los partos no los hacen los médicos ni las comadronas, los hacen las mujeres", advierten.

   Por otro lado, Marcos recuerda que los bebés nacen hinchados de líquido y pesan más de lo que tocaría. "Lo único que pasa con la pérdida inicial de peso es que pierden todo ese líquido, lo que puede inducir a error y a obligar a esos padres a suplementar su alimentación con leche artificial por exceso de pérdida de peso, cuando en realidad no debería ser así", considera.

    También llama la atención sobre los partos inducidos a partir de la 41 semana de gestación, donde se "fuerza" en cierta forma al bebé a salir, impulsado por el empleo de la oxitocina que se inyecta en la madre, "causando mucho estrés en el bebé".

Aquí precisa que, cuando una madre tiene contracciones espontáneas, de forma natural, con cada una reduce el aporte de oxígeno a la placenta, pero el bebé tiene mecanismos para compensarlo. "Cuando se fuerza por la oxitocina no todos los bebés lo pueden tolerar bien. Luego nacen con poco instinto de succión, tragan mucho líquido amniótico, y los primeros días del parto se encuentran nauseosos y molestos de barriga y no quieren mamar, no se cogen al pecho", advierte la comadrona.

   Con ello, celebra que cuando el parto ha sido natural y sin muchos daños, el bebé nace con ansia y capacidad de mamar, no está agotado del parto, empieza a mamar en la primera media hora después del nacimiento y lo hace con alta frecuencia. "El primer día no tanto pero sobre todo a partir de las 24 horas y de manera irrestricta; es entonces cuando la madre establece una súper buena producción de leche", agrega.

   Resalta también el papel del piel con piel tras el parto. "Esta comprobado el éxito en el largo plazo de la lactancia en la no separación madre-bebé después del alumbramiento", remarca.

EL CASO DE LAS CESÁREAS

   Una de las situaciones que peor favorecen el inicio de la lactancia suele ser la cesárea, donde la madre no se encuentra en las mejores condiciones físicas para poner su empeño en el inicio de una lactancia que, sí que es posible a pesar de las adversidades.

   Desde la Academia Americana de Pediatría sostienen que, dentro de este cuadro, las buenas noticias son que el método de parto tiene "poco efecto" en su capacidad para amamantar a su bebé. "Su leche materna llegará tan pronto esté disponible, al igual que si hubiera tenido un parto vaginal. Es especialmente importante comenzar a amamantar tan pronto pueda y continuar amamantando a su bebé de forma frecuente para garantizar un buen abastecimiento de leche. Incluso si necesita algunas horas para recuperarse de su cirugía, usted podrá amamantar a su bebé tan pronto se sienta lista", sentencia.