ZARAGOZA 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El psiquiatra de Adultos Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria Hospital Provincial Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza, Daniel Pérez, ha manifestado que nadie sufre trastornos de la conducta alimentaria "voluntariamente" y por eso "no hay que avergonzarse, hay que pedir ayuda".
Así lo ha indicado durante su intervención en la videoconferencia 'Psicología de la alimentación: comportamientos saludables y trastornos de la conducta', ofrecida por Fundación Ibercaja a través de su canal YouTube.
En ella, han participado también el jefe de Sección de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Hospital Clínico de Zaragoza, Pedro Manuel Ruiz Lázaro; y la trabajadora social especializada en salud mental de la Asociación Aragonesa de familiares de enfermos con un Trastorno de la Conducta Alimentaria, Mercedes Barcelona, ha informado Fundación Ibercaja en una nota de prensa.
La periodista Mayte Salvador ha moderado el encuentro, que ha presentado la jefe del Área de Desarrollo de las personas y Centros de Fundación Ibercaja, Inés González, quien ha recordado que el objetivo de la entidad "es dar respuesta a las necesidades de la sociedad" y "en este momento procuramos estar atentos a las necesidades de esas personas que se han visto más afectadas por la pandemia", que ha provocado un "empeoramiento" de los pacientes con Trastornos de la Conducta Alimentaria "y un crecimiento exponencial del número de casos".
Así lo ha confirmado el psiquiatra Daniel Pérez, que ha asegurado que se ha duplicado a escala mundial el número de casos. Ha añadido que los pacientes adultos "llegan a la consulta avergonzados porque creen que algo han hecho mal", con un sufrimiento "extra" porque "son conscientes de lo que hacen" de forma que la culpa "es una de las grandes protagonistas en la consulta".
A su entender, con la pandemia, "no es que se tengan más problemas, es que tenemos menos válvulas de escape" y, por ejemplo, "no podemos viajar o quedar a cenar con los amigos".
PEOR SALUD MENTAL
El jefe de Sección de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Hospital Clínico de Zaragoza, Pedro Manuel Ruiz Lázaro, ha reconocido que durante la pandemia "ha empeorado la salud mental de toda la población y ha aumentado el número de casos de Trastornos de la Conducta Alimentaria y su gravedad".
Este especialista ha mostrado su preocupación "por este incremento de casos nuevos y de ingresos hospitalarios precisamente en un momento en el que no tenemos camas".
Además, los ponentes han destacado la necesidad de que las personas con Trastorno de Conducta Alimentaria pidan ayuda. "Pedir ayuda y no aislarse en sí mismos es el primer paso para curar los trastornos de la conducta alimentaria", ha enfatizado Daniel Pérez, mientras que Ruiz Lázaro ha insistido en que "buscar ayuda no es debilidad".
Por su parte, la trabajadora social especializada en salud mental de la Asociación Aragonesa de familiares de enfermos con un Trastorno de la Conducta Alimentaria, Mercedes Barcelona, ha dicho que algunos pacientes "tienen miedo antes de ir a la consulta porque temen que el profesional va a centrarse más en su índice de masa a corporal que en lo que están sufriendo", cuando "ellos quieren que se ocupen de sus emociones y no de su peso".
El jefe de Sección de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Clínico también ha comentado que son los familiares los que acostumbran a acudir a los psiquiatras, son "el motor de cambio", a lo que Mercedes Barcelona ha apostillado que las familias son las que acuden a la asociación "a contrastar sus sospechas".
En esta línea, el psiquiatra de Adultos del Hospital Provincial Nuestra Señora de Gracia ha considerado fundamental el trabajo con las familias, si bien ha apuntado que las personas con trastornos alimentarios "se curan ellas mismas, las familias y los profesionales solo acompañan".
Tanto los psiquiatras, como la trabajadora social han insistido en la necesidad de educar en la frustración. "Esta sociedad que prima tanto la estética y el culto al cuerpo es tramposa porque nadie permanece eternamente joven, ni eternamente delgada", ha sostenido Ruiz Lázaro. "Fomentamos los valores de la estética cuando hay cosas más importantes como que la gente sea buena persona", ha apostillado.
VIDEOCONFERENCIAS
El Área de Desarrollo de las Personas de Fundación Ibercaja ha dedicado sus videoconferencias anteriores a la pobreza, la salud mental, las adicciones y la discapacidad.
La entidad ha precisado al respeto que el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 de la Agenda 2030, con la que Fundación Ibercaja está comprometida, es promover la vida saludable, el bienestar para todas las personas de todas las edades y los Trastornos de la Conducta Alimentaria son enfermedades psiquiátricas graves con consecuencias para la salud física y psicológica de los pacientes y también para sus familias.