MADRID 17 May. (EUROPA PRESS) -
Cinco de cada diez pacientes con enfermedad renal crónica en España (ERC) se rascan continuamente debido al prurito, una sensación o síntoma que se manifiesta en forma de picor desagradable, que induce al rascado de la piel, y del que se puede derivar una importante merma en la calidad de vida de los pacientes renales que lo padecen, provocando problemas de depresión o del estado de ánimo.
De hecho, un estudio realizado por la Sociedad Española de Nefrología (SEN) ha evidenciado que el 50 por ciento de los pacientes con ERC analizados (un total de 1.605 pacientes) sufren prurito, y que el 26,7 por ciento de ellos cursan de forma moderada a grave esta sensación desagradable de picor, que les afecta en su salud y calidad de vida con importantes trastornos, como cambios de estado de ánimo, angustia, depresión, falta de descanso, o dificultad para dormir.
Además, el estudio ha señalado que el porcentaje de pacientes con cambios de su estado de ánimo aumentó a medida que aumentaba la gravedad del prurito, siendo la angustia y la falta de descanso los parámetros más afectados, mientras que también se observó un aumento de la depresión.
La investigación también ha evidenciado que la función sexual y el descenso del deseo aumentaron a medida que se incrementaba la gravedad de la ERC asociada al prurito; y los pacientes renales con prurito reportaron mayores trastornos del sueño (dificultad para dormir, sueño inquieto e ingesta de medicamentos para dormir) que los pacientes sin prurito, lo que aumentó con el aumento de la gravedad del prurito.
Por otra parte, la prevalencia del prurito fue mayor en los pacientes con ERC avanzada sin diálisis, lo que sugiere un beneficio de la diálisis para reducir el picor en estos pacientes. El estudio también ha mostrado que los pacientes con ERC y prurito informaron de picazón en todo el cuerpo y en cualquier momento del día, aunque con más frecuencia por la noche.
"Hasta ahora no existía una aproximación real sobre el prurito en los pacientes con ERC en España, que en su mayoría no saben por qué tiene esa sensación de rascado continuo. Este estudio nos ha permitido no sólo realizar el primer registro de datos sobre prurito asociado a la ERC en el mundo, sino conocer más en profundidad este problema, de manera que podamos establecer medidas y actuaciones para mejorar su tratamiento y la calidad de vida de las personas que lo padecen, reduciendo así el impacto que tiene en ellas", ha explicado la presidenta de la SEN, Patricia de Sequera.
Las causas del prurito asociado a la ERC no están claramente definidas por lo que no es sencillo encontrar un tratamiento eficaz. El prurito puede tener muchas causas y su etiología es multifactorial: toxinas del cuerpo que no se eliminan bien en la hemodiálisis, tener el calcio y el fósforo alterados o sufrir una alteración de los receptores opioides en la piel.
"Todo esto hace que los nefrólogos nos sintamos, en ocasiones, frustrados por no poder resolver este problema. Tampoco los pacientes identifican la ERC como patología relacionada con su prurito, por lo que no es infrecuente que no transmitan a los profesionales este síntoma, haciendo más difícil su diagnóstico y cómo poder actuar", A pesar de que el prurito tiene un impacto negativo en la calidad de vida y puede afectar negativamente los resultados clínicos y aumentar el riesgo de mortalidad de estos pacientes, algunos nefrólogos y especialistas aún tienden a subestimar el número de pacientes con este síntoma, y en algunos casos no conocen con claridad que esas graves consecuencias pueden ser provocadas por ello", ha dicho el coordinador de registros de la SEN y uno de los responsables del estudio, Emilio J. Sánchez.
Además, actualmente no hay un tratamiento específico para el prurito, sólo diversas recomendaciones y consejos sanitarios para mejorar la hidratación de la piel, como beber más agua (aunque esta opción está limitada a pacientes que conservan la diuresis), utilizar cremas hidratantes, tomar medicamentos antihistamínicos o gabapentinoides, o realizar fototerapia, entre otras.