MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las protestas sociales en Hong Kong podrían estar afectando a la salud mental de su población, según un estudio observacional realizado durante diez años y publicado en la revista científica 'The Lancet'.
Hong Kong ha experimentado una ola de protestas masivas desde junio de 2019, iniciada por el ahora archivado proyecto de ley de extradición. En el transcurso de 7 meses, las protestas pacíficas se han combinado con algunos actos de violencia. Se han reportado síntomas de depresión y de estrés postraumático después de los disturbios generalizados en todo el mundo. Sin embargo, se sabe poco sobre el impacto de la salud mental en la población general durante las recientes protestas en Hong Kong.
Las estimaciones de estos investigadores apuntan que la prevalencia de la depresión en los residentes de Hong Kong de 18 años o más fue cinco veces más alta durante los disturbios sociales de 2019, que lo normal antes de 2014, cuando se produjeron las protestas de 'Occupy Central': 11 por ciento frente a 2 por ciento. Por su parte, los síntomas de trastorno de estrés postraumático (TEPT) se calcularon en seis veces más altos: del 5 por ciento poco después de 'Occupy Central' en marzo de 2015 a casi el 32 por ciento en septiembre/noviembre de 2019.
En base a estos datos, los autores creen que los profesionales de salud mental deberían prepararse para un aumento potencial del 12 por ciento en la demanda de servicios del sector público, lo que requerirá un "aumento importante" en la capacidad de estos servicios.
"Hong Kong no dispone de recursos suficientes para hacer frente a este exceso de carga en materia de salud mental. Con un tiempo de espera promedio de los pacientes externos del sector público de hasta 64 semanas, es importante que mejoremos la prestación de servicios de salud mental y de atención social para que todos los que lo necesiten puedan acceder a servicios de alta calidad", ha señalado el colíder de la investigación, Gabriel Leung, de la Universidad de Hong Kong.
DETALLES DEL ESTUDIO
Esta investigación es el estudio de cohorte prospectivo más grande y más largo sobre el impacto de las protestas sociales en la salud mental de toda la población en el mundo. Los científicos recogieron una gran cantidad de datos. Los hallazgos de dos encuestas iniciales (marzo de 2009 a abril de 2011 y agosto de 2011 a marzo de 2014), en las que participaron más de 1.000 residentes de Hong Kong muestreados al azar, se compararon con una muestra representativa de 1.715 adultos encuestados cinco veces durante y después de 'Occupy Central', y 1.736 adultos encuestados dos veces durante los disturbios sociales de 2019 (junio a agosto y septiembre a noviembre de 2019).
Uno de cada cinco residentes adultos de Hong Kong (22%) encuestados durante los disturbios de 2019 reportaron probable depresión mayor o sospecha de estrés postraumático. Los autores afirman que esto es comparable a la prevalencia de las condiciones de salud mental observadas después de desastres de gran escala, conflictos armados o ataques terroristas.
Durante las protestas que se siguen sucediendo en Hong Kong, los investigadores calculan que la prevalencia de sospecha de estrés postraumático fue de alrededor de 13 por ciento, lo equivalente a alrededor de 810.000 afectados. Aquellos que usan las redes sociales durante dos horas o más al día para revisar noticias o eventos sociopolíticos parecen estar en mayor riesgo de depresión y estrés postraumático, según los investigadores.