MADRID 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
La terapia de luz láser ha demostrado ser eficaz para mejorar la memoria a corto plazo, según un estudio publicado en la revista 'Science Advances'.
Científicos de la Universidad de Birmingham, en el Reino Unido, y de la Universidad Normal de Pekín, en China, han demostrado que la terapia, que no es invasiva, podía mejorar la memoria a corto plazo, o de trabajo, en las personas hasta en un 25%.
El tratamiento, denominado fotobiomodulación transcraneal (tPBM), se aplica en una zona del cerebro conocida como córtex prefrontal derecho. Esta zona está ampliamente reconocida como importante para la memoria de trabajo. En su experimento, el equipo mostró cómo la memoria de trabajo mejoraba entre los participantes en la investigación tras varios minutos de tratamiento. También pudieron seguir los cambios en la actividad cerebral mediante la monitorización del electroencefalograma (EEG) durante el tratamiento y las pruebas.
Estudios anteriores han demostrado que el tratamiento con luz láser mejora la memoria de trabajo en ratones, y los estudios en humanos han demostrado que el tratamiento con tPBM puede mejorar la precisión, acelerar el tiempo de reacción y mejorar las funciones de alto orden, como la atención y la emoción.
Sin embargo, este es el primer estudio que confirma una relación entre la tPBM y la memoria de trabajo en humanos.
Dongwei Li, estudiante de doctorado visitante en el Centro de Salud Cerebral Humana de la Universidad de Birmingham y coautor del artículo explica que "las personas con afecciones como el TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) u otros trastornos relacionados con la atención podrían beneficiarse de este tipo de tratamiento, que es seguro, sencillo y no invasivo, sin efectos secundarios".
En el estudio, los investigadores de la Universidad Normal de Pekín realizaron experimentos con 90 participantes masculinos y femeninos de entre 18 y 25 años. Los participantes fueron tratados con luz láser en el córtex prefrontal derecho a una longitud de onda de 1.064 nm, mientras que otros fueron tratados con una longitud de onda más corta, o el tratamiento se administró en el córtex prefrontal izquierdo. Cada participante fue tratado también con un tPBM simulado, o inactivo, para descartar el efecto placebo.
Tras el tratamiento con tPBM durante 12 minutos, se pidió a los participantes que recordaran las orientaciones o el color de un conjunto de elementos mostrados en una pantalla. Los participantes tratados con luz láser en el córtex prefrontal derecho a 1.064 nm mostraron claras mejoras en la memoria respecto a los que habían recibido los otros tratamientos. Mientras que los participantes que recibieron otras variantes de tratamiento pudieron recordar entre 3 y 4 de los objetos de la prueba, los que recibieron el tratamiento dirigido pudieron recordar entre 4 y 5 objetos.
Los datos, incluidos los de la monitorización del electroencefalograma (EEG) durante el experimento, se analizaron en la Universidad de Birmingham y mostraron cambios en la actividad cerebral que también predijeron las mejoras en el rendimiento de la memoria.
Los investigadores aún no saben con exactitud por qué el tratamiento produce efectos positivos en la memoria de trabajo, ni cuánto duran los efectos. Está previsto que se realicen más investigaciones sobre estos aspectos.
El profesor Ole Jensen, también del Centro para la Salud del Cerebro Humano, añade que es necesario seguir investigando para entender exactamente por qué el tPBM tiene este efecto positivo, "pero es posible que la luz esté estimulando los astrocitos -las centrales de energía- en las células nerviosas dentro del córtex prefrontal, y que esto tenga un efecto positivo en la eficiencia de las células. También investigaremos la duración de los efectos --añade--. Está claro que si estos experimentos han de conducir a una intervención clínica, tendremos que ver beneficios duraderos".