Los problemas de disfunción erectil aumentan en verano al dispararse el consumo de alcohol

Actualizado: miércoles, 3 agosto 2011 15:13

MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -

Con la llegada del periodo estival y vacacional se dispara el consumo de alcohol y cannabis, especialmente entre los jóvenes de entre 15 y 29 años, según advierten desde Boston Medical Group. Por ello, recuerdan que el consumo de alcohol produce en los varones una interrupción de la erección, independientemente de la dosis tomada, ya que inhibe el buen funcionamiento del sistema nervioso central (implicado directamente en la respuesta del estimulo sexual).

"El alcohol retarda, distorsiona y enlentece la percepción y respuesta de nuestros sentidos como reflejos, visión, audición, etcétera", explica el director médico de Boston Medical Group, Jose Benítez, a lo que añade que "dentro de estas respuestas, también se encuentra la sexual. Esto sucede tanto con el bebedor ocasional, como en el habitual, con la diferencia que en los pacientes alcohólicos estos trastornos se van convirtiendo en crónicos y en ocasiones de carácter irreversible".

En muchos casos esta situación representa un fracaso para el hombre y a partir de ahí comienza a desarrollar sentimientos de ansiedad que dificultarán la respuesta de excitación sexual en el siguiente encuentro. De esta forma, expone el doctor, "se puede establecer un círculo vicioso que lleve al desarrollo permanente de una disfunción eréctil en el hombre, porque incrementa su preocupación por saber si tendrá o no una erección adecuada que finalmente tenga que ser tratada por un especialista".

Más del 50% de los hombres menores de 50 años tienen problemas de erección en estado de embriaguez. "El alcohol inhibe el buen funcionamiento del sistema nervioso central, por lo que si no se produce una correcta comunicación entre el estímulos, el cerebro y el sistema circulatorio se entorpece la llegada de la sangre al pene, dificultando la penetración y el coito", explica el doctor Benítez.

Según el experto, "en torno al alcohol se han creado una serie de mitos, como creer que las sustancias etílicas mejoran el funcionamiento sexual. Pero la realidad es que el consumo de alcohol provoca trastornos en los mecanismos de la erección, produciendo Disfunción eréctil transitoria en muchos casos, ya que esta sustancia afecta al sistema vascular implicado en la erección".

Los efectos que el alcohol produce en el cuerpo son "innegables" para Benítez y explica que "es un estimulante del apetito, tranquilizante, sedativo y produce sensaciones positivas como la desinhibición". Estas sensaciones se producen por un consumo "moderado", según el doctor, "dos copas". Pero por el contrario, si estos límites se traspasan "puede dificultar las relaciones interpersonales, y a pesar de que pueda despertar un estimulo erótico alto, interfiere en la capacidad de mantener una erección adecuada", concluye.