MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los primeros 1.000 días que corresponden a 270 de gestación y 730 restantes, constituyen un periodo esencial para forjar una buena salud a largo plazo para el bebé, según ha apuntado el doctor Juan José Díaz Martín del Hospital Universitario Central de Asturias en el simposio 'Los primeros 1000 días: asegurando la salud de las generaciones futuras' que ha celebrado Danone Nutricia Early Life Nutrition recientemente en Bilbao.
"Una buena alimentación desempeña un papel crucial durante dicho periodo. El rápido ritmo de crecimiento y desarrollo en esta etapa de la vida requiere unas condiciones nutricionales muy específicas para cada una de sus fases (embarazo, lactancia, destete, etc.), por lo que hay que garantizar a madres e hijos el acceso a una nutrición óptima" ha dicho el doctor Díaz.
El doctor ante este marco ha realizado una serie de recomendaciones para llevar a cabo durante estos 1.000 primeros días clave. El cuidado comienza cuando la mujer está embarazada, por lo tanto es importante que la madre tenga un peso adecuado durante todo el embarazo.
Según ha señalado el doctor, la lactancia durante los seis primeros meses ofrece grandes beneficios tanto a corto como a largo plazo y por ello la madre debe de cuidar su alimentación durante todo el embarazo y después, evitando déficits nutricionales en el hijo debido a que la leche materna aporta todos los nutrientes que el bebé necesita.
A partir de los seis meses de edad, el experto recomienda introducir poco a poco alimentación complementaria porque la leche materna por si sola comienza a no terminar de satisfacer todas las necesidades. La introducción de texturas sólidas y nuevos sabores ayudan a desarrollar buenos hábitos alimenticios.
El doctor contaba en el congreso que a finales del siglo pasado se estudiaba la hipótesis de la programación fetal desarrollada a partir de los estudios de Osmond y Barker que relacionaban el peso de los bebés al nacer con la mortalidad por enfermedades cardiovasculares en la edad adulta.
En relación con este tema, el doctor dice que "se han venido acumulando evidencias que apoyan dicha teoría. Aún no hay un conocimiento exhaustivo de lo que realmente sucede, pero estudios a gran escala están poniendo de manifiesto la importancia de la nutrición en los primeros meses de vida y cómo esto puede condicionar la salud futura".
Uno de los estudios que demuestran esta evidencia ha sido el de Alsalma 2.0. Un análisis cuantitativo realizado por un comité de expertos en Nutrición y Pediatría y patrocinado por la compañía Danone Nutricia dentro de su programa educacional "Alimentando la Salud del Mañana".
Se centra exclusivamente en analizar los hábitos nutricionales de los niños menores de 3 años para comparar los resultados obtenidos con las recomendaciones de consumo energético e ingesta de nutrientes. El resultado fue que el 97,9 por ciento de los niños de entre 7 meses y 3 años ingirieron una cantidad de proteínas superior a la recomendada y que esto se relacionaba con un mayor índice de masa corporal.