MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la recién estrenada Sociedad Española Multidisciplinar del Dolor (SEMDOR), el doctor Luis Miguel Torres, destaca que el ibuprofeno no agrava los cuadros de infección por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
"El ibuprofeno no sólo no agrava a los pacientes de COVID-19, sino que es uno de los mejores antiinflamatorios en estos cuadros de infección, ya que contrarresta gran parte de las proteínas proinflamatorias en mayor cantidad de lo que lo hace el paracetamol. Por eso, nuestra propuesta en los pacientes COVID-19 es el uso del ibuprofeno en lugar del paracetamol para el tratamiento de la fiebre", asegura en una entrevista con Europa Press el también presidente de la Sociedad Andaluza del Dolor.
Se trata de una tesis que el doctor Torres también defendió hace unos meses en la webinar sobre 'El dolor frente a la COVID-19', con una ponencia llamada 'Los medicamentos analgésicos en pacientes COVID-19', en la que propugnó igualmente la toma de ibuprofeno, frente a esta premisa inicial que promulgaba la toma preferente de paracetamol en caso de infección de coronavirus.
Así, el también profesor titular de la Universidad de Cádiz y director del Departamento de Cirugía de la Universidad de Cádiz explica que en los trabajos publicados se comprueba que el ibuprofeno es un fármaco que disminuye la mayoría de las proteínas proinflamatorias, "esta afirmación viene recogida de la literatura científica", en la cual se estudian los efectos de los distintos analgésicos sobre las proteínas proinflamatorias del pulmón, el lugar donde se desarrolla el mayor problema de la infección por el SARS-CoV-2.
De hecho, el experto en dolor recuerda que en Argentina se está realizando un ensayo clínico del uso de ibuprofeno inhalado en los pacientes con la infección del nuevo coronavirus, siendo los resultados preliminares "muy esperanzadores", según considera, y no ya sólo en el manejo de la fiebre, sino también en la inflamación que ocasiona tantos problemas en los pacientes.
A su vez, advierte de que si comparamos los pacientes COVID-19 con aquellos otros pacientes que tienen otra enfermedad pulmonar inflamatoria, como el síndrome de distrés respiratorio, se ve igualmente que en estos las proteínas que se expresan por la inflamación que provoca la enfermedad son contrarrestadas "de forma más eficaz por el ibuprofeno y por fármacos similares que por el paracetamol, que es un agente neutro en este sentido".
Ahora bien, el presidente de SEMDOR recuerda cuáles son las contraindicaciones del uso del ibuprofeno en los pacientes infectados con la COVID-19: "Son las mismas que para los pacientes no contagiados, es decir, no se puede emplear en aquellos pacientes que tienen úlcera de estómago, problemas de coagulación y problemas renales, o bien son hipertensos".
En última instancia, lamenta que como consecuencia del bulo difundido sobre el ibuprofeno frente a la COVID-19 es posible que muchos pacientes hayan interrumpido su tratamiento en caso de estar contagiados, cuando lo mejor es utilizarlo.
"En esta pandemia las 'fake news' son algo muy corriente y tremendamente descorazonador. La población necesita información veraz y contrastada sobre los tratamientos. Hemos visto muchos bulos que no sólo han partido de gente mal intencionada, sino incluso de médicos, organizaciones sanitarias y de políticos que, en un intento de llevar alguna esperanza a los pacientes, han recomendado tratamientos que luego se han demostrado que no servían para nada, o incluso que eran perjudiciales", remarca.
EL IBUPROFENO TAMBIÉN CLAVE FRENTE AL DOLOR AGUDO
Por otro lado, a su vez jefe del Servicio de Anestesia Reanimación y Tratamiento del Dolor del Hospital Puerta del Mar de Cádiz recuerda el importante papel que desarrolla el ibuprofeno frente al dolor agudo, "una señal de alarma de algún problema en el organismo, como una fractura o una quemadura, o bien surge tras una operación quirúrgica", y que puede ser resuelto "rápidamente y de forma sencilla" gracias a este tipo de antiinflamatorios no esteroides (AINE).
El doctor Torres revela que en el momento actual, el dolor agudo se debería tratar en más del 95% de los pacientes sin problemas, al menos en los países occidentales, ya que disponemos de los conocimientos, de los fármacos, y de la tecnología para que sea controlado de forma eficaz. "Esto no quiere decir que se haga así, ya que muchos hospitales aún carecen de unidades de dolor agudo y el problema principal se centra en la falta de organización del abordaje del dolor postoperatorio, pudiendo producirse casos de dolor persistente, que además pueden cronificarse y agravar la situación del paciente y su curso quirúrgico", llama la atención.
La Sociedad Española Multidisciplinar del Dolor (SEMDOR) nace con el propósito de trasladar al mundo del dolor la realidad del tratamiento actual, que es un enfoque multidisciplinar, según justifica el doctor. "El dolor es una enfermedad que afecta a más de 7 millones de españoles y por tanto es un enorme problema de salud pública, que no puede ser tratado por una sola especialidad médica. Es más, nace con la vocación de ayudar en la coordinación a las todas las profesiones sanitarias implicadas en el dolor para mejorar los tratamientos", sentencia Torres.