MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Niño Jesús coordina el Proyecto Cunina, una investigación pionera que podría prevenir la leucemia linfobástica aguda (LLA) en niños mediante un estudio del genoma completo, identificando y analizando la contribución de las mutaciones en el desarrollo de la enfermedad, con el fin de estudiar la susceptibilidad a desarrollarla.
El proyecto, de carácter internacional, financiado con un total de 540.000 euros por la Fundación Unoentrecienmil, y donde también participan el Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca y el Hospital Universitario de Düsseldorf (Alemania), se ha basado en el antecedente de que el 5 por ciento de los niños que nacen tienen susceptibilidad a desarrollar leucemia, que aparece o no en función de la exposición a diferentes agentes. Además, los investigadores han destacado que la incidencia de la leucemia ha aumentado en estos últimos años.
Así, otra novedad con respecto a la investigación actual es que el proyecto no se centrará solo en el niño, sino en su familia y en el papel de su entorno. De esta forma, se ahonda en la capacidad de investigar las condiciones que se necesitan para que la enfermedad prospere, de manera que se pueda actuar sobre ellas de forma preventiva.
Hasta ahora, se conocen hasta 90 genes de predisposición a la leucemia. Esta investigación, en cambio, ambiciona estudiar un total de 30.000, identificando aquellos nuevos que tengan un papel importante en la enfermedad, y dando a conocer nuevos mecanismos de herencia que determinen el desarrollo de la misma.
"Esto implicaría estudiar otros genes que tienen impacto en la susceptibilidad y que explican por qué unos niños la desarrollan y otros no; por qué niños ante la misma enfermedad tienen una respuesta y otros una diferente; y por qué unos niños desarrollan unos efectos a largo plazo y otros no", ha señalado el coordinador del proyecto y responsable de la Unidad de Terapias Avanzadas del Hospital Niño Jesús, Manuel Pérez Orellana.
"Si esta susceptibilidad nunca se expone a un ambiente de infección, nunca se desarrollará la enfermedad, pero si se expone a infección, cierto porcentaje de ellos desarrollará la enfermedad, por tanto, si sabemos qué desencadena ese desarrollo de la leucemia, esta se podrá prevenir", ha apostillado.
Así, en el Proyecto Cunina participarán un total de cien familias cuyos hijos han sido diagnosticados de LLA. Este enfoque, además, es el primero de este tipo que secuencia el exoma completo de los tríos familiares (padre-madre-hijo) con esta leucemia y cuyos hallazgos serán validados funcionalmente.
Esto implica ampliar el conocimiento sobre las causas de la enfermedad y las bases genéticas de la predisposición a tener en un futuro esta leucemia; no solo en el trío padre-madre-hijo, sino que se extendería a los familiares de primera línea.
PREDISPOSICIÓN A DESARROLLAR OTROS TUMORES
"Podremos dilucidar aspectos tan importantes como la predisposición genética al cáncer por parte del paciente, su predisposición a una excesiva toxicidad de los tratamientos y a desarrollar otros tumores a lo largo de su vida, así como el potencial riesgo de sufrir cáncer por parte de otros miembros de su familia, como sus padres o hermanos o familiares de primera línea", ha expresado Ramírez.
En cuanto al desarrollo del proyecto y la investigación, el coordinador ha expresado que seguirán "criterios muy estrictos". "Primero lo vamos a someter a investigación en el laboratorio, y luego los resultados los vamos a someter a investigación en modelos que representen las condiciones ambientales de los niños", ha detallado.
De esta forma, el resultado final del proyecto de investigación será "identificar quién puede desarrollar esta enfermedad y en qué condiciones las va a desarrollar". Teniendo esta información, se podrá "empezar a diseñar qué medidas aplicar de forma preventiva", ha concluido Ramírez.