MADRID, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Estatal de San Diego (Estados Unidos) concluyen que las políticas antitabaco de los hoteles de Estados Unidos no siempre protegen a los huéspedes, ya que hay contaminantes asociados al cáncer y al asma procedentes de los residuos del humo de segunda y tercera mano que permanecen en el polvo, las alfombras y los muebles.
Los investigadores analizaron 332.277 opiniones de huéspedes de TripAdvisor sobre sus experiencias en 477 hoteles de Estados Unidos en diez estados. De los hoteles incluidos, el 96 por ciento eran libres de humo según TripAdvisor, pero solo el 63 por ciento de los sitios web de los hoteles declaraban que eran libres de humo.
Por cada 100 opiniones de habitaciones de no fumadores, hubo, de media, diez quejas relacionadas con el tabaco, los cigarrillos electrónicos o la contaminación por cannabis. De estas quejas, el 80 por ciento se referían a residuos de humo de tercera mano dejados por productos de tabaco utilizados por huéspedes anteriores, más que al humo de segunda mano de otros huéspedes que fumaban activamente.
Uno de los investigadores del estudio, Georg Matt, profesor de psicología y salud pública de la Universidad Estatal de San Diego, ha apuntado que "muchos hoteles afirman ofrecer a sus huéspedes habitaciones libres de humo, pero no pueden cumplir esta promesa". "Esto es especialmente preocupante para los huéspedes que no pueden permitirse los hoteles más caros", añade.
En los hoteles con peores resultados, hasta 25 de cada 100 opiniones de los huéspedes incluían quejas sobre el humo de tercera mano del tabaco. En los hoteles con mejores resultados, ninguna de las opiniones de los huéspedes incluía este tipo de quejas. Parte de este marcado contraste puede atribuirse a si los hoteles hacen cumplir las políticas de espacios libres de humo.
Por término medio, los hoteles que prometieron edificios totalmente libres de humo tuvieron un 26 por ciento menos de quejas que los hoteles que permitían fumar en las habitaciones designadas. Dos de los primeros en adoptar políticas de hoteles 100 por ciento libres de humo, Marriott International y Hilton, tuvieron el menor número de quejas relacionadas con el tabaco, los cigarrillos electrónicos o el cannabis. En comparación, Choice y Wyndham, dos marcas hoteleras que adoptaron políticas de hoteles sin humo unos años después, tuvieron el triple de quejas que Marriott y Hilton.
Los hoteles con calificaciones inferiores a dos de cinco estrellas tuvieron el doble de quejas relacionadas con el tabaco que los hoteles de más estrellas. Y los hoteles de Los Ángeles, Detroit y Birmingham fueron los que más quejas recibieron, mientras que los de Salt Lake City y Omaha fueron los que menos.
Para crear experiencias 100 por ciento libres de humo, según Matt, los hoteles deben abandonar la idea de que las habitaciones designadas para fumadores pueden proteger a los huéspedes de las habitaciones para no fumadores. "La conversión a propiedades libres de humo y la reparación de las habitaciones designadas para fumadores son las únicas formas de proteger a los huéspedes del humo de segunda y tercera mano", expresa.
"Además, los hoteles deben educar y recordar continuamente a sus huéspedes las políticas de espacios libres de humo y sus consecuencias, y formar a su personal para que controle y haga cumplir las normas", afirma.
Según los investigadores, dormir en una habitación de hotel que huele a humo de tercera mano no solo puede arruinar unas vacaciones muy necesarias o un viaje de negocios lleno de trabajo, sino que también es perjudicial para la salud. Si los hoteles protegen a sus huéspedes comprometiéndose, aplicando y haciendo cumplir las políticas de edificios 100 por ciento libres de humo, como algunos han conseguido hacer, los huéspedes tendrán experiencias más positivas que probablemente se reflejarán en sus opiniones y valoraciones.