MADRID 23 May. (EUROPA PRESS) -
Las personas que son responsables de cuidar a un familiar que sufre incontinencia y no tienen información sobre sus cuidados tienen una peor calidad de vida, según un nuevo estudio realizado por la empresa de investigación de mercados Ipsos y Eurocarers y presentado en el marco del 'IV Foro Mundial sobre la Incontinencia' celebrado el pasado mes de abril en Copenhague.
En concreto, los cuidadores que decían estar informados sobre los cuidados de la Incontinencia presentaban, de forma general, una mejor calidad de vida --con una puntuación del 14,52-- que los que no lo estaban --11,15--, una diferencia del 23 por ciento.
Estos datos demuestran que la información es un elemento de apoyo fundamental y que, por tanto, es necesario que haya un acceso igualitario y abierto a la información, de patología y tratamientos, disponible para todos con el objetivo de conseguir que la labor que realizan pueda ser sostenible en el tiempo y no se conviertan en una segunda víctima de la enfermedad.
La investigación se realizó en Italia, en el año 2011 y analizó la calidad de vida relativa en más de 600 cuidadores, todos ellos de más de 18 años de edad, que cuidaban durante al menos 10 horas a la semana de un familiar de más de 60 años que no vivía en una residencia.
Asimismo, se comparó dos grupos utilizando un indicador mixto de la calidad de vida. El primer grupo estaba formado por personas que cuidaban al menos durante 10 horas a la semana de familiares ancianos que aún no precisaban cuidados formales, pero que sufrían alguna dolencia por la que necesitaban ayuda. El segundo estaba integrado por cuidadores que debían hacer frente a la tarea adicional de controlar los problemas de su familiar con incontinencia moderada o grave.
"El estrés adicional de tratar con un familiar que sufre incontinencia afecta gravemente a muchos cuidadores", ha comentado el vicepresidente de investigación de Eurocarers, Giovanni Lamura.
No obstante, se identificaron otros factores de riesgo con impacto directo en la calidad de vida de los cuidadores familiares de personas con incontinencia tales como el escaso acceso a un asesoramiento, la mayor edad o bien del cuidador o del familiar --o de ambos--, el llevar más de cinco años asumiendo las funciones como cuidador principal, los bajos ingresos y la condición de masculina que cuida de su esposas o de un familiar mujer.
Por último, un segundo estudio realizado también por Ipsos y finalizado en el año 2012 sobre los mismos sujetos activos, en siete países europeos --Alemania, Brasil, China, Estados Unidos, Francia, Rusia y España-- halló un subgrupo, representativo del 20 por ciento de todas las personas que cuidan de familiares con Incontinencia, que tenían una calidad de vida inferior en un 47,8 por ciento frente a la media del grupo estudiado.
Éstos cuidadores, señaló la investigación, hablaban con frecuencia de sentimientos de impotencia, de encontrarse exhaustos tanto emocional como físicamente y de sentirse alejados de cualquier atisbo de llevar una vida normal, debido a la carga de los cuidados.