MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las personas que hablan dos idiomas tienen más materia gris en la región de control ejecutivo del cerebro que quienes dominan una sola lengua, según sugiere un nuevo estudio publicado en la revista 'Cerebral Cortex'.
En las últimas décadas, se ha avanzado mucho en la comprensión de bilingüismo. Al principio se pensaba que era una desventaja porque el manejo de dos vocabularios provocaría un retraso en el desarrollo del lenguaje en los niños. Sin embargo, se ha demostrado que los individuos bilingües obtienen mejores resultados, en comparación con los monolingües, en tareas que requieren atención, inhibición y memoria a corto plazo, denominados como 'control ejecutivo'.
Esta 'ventaja bilingüe' se cree que es producida por el uso y manejo de dos lenguas habladas a largo plazo. Pero se mantiene el escepticismo acerca de estas ventajas, ya que no se observan en todos los estudios.
"Las inconsistencias en los informes sobre la ventaja del bilingüísmo principalmente de la variedad de tareas que se utilizan en los intentos para obtener la ventaja", dice el autor principal, Guinevere Eden, DPhil, director del Centro para el Estudio de Aprendizaje de la Universidad de Georgetown Medical Center (GUMC).
"Teniendo en cuenta esta preocupación, tomamos un enfoque diferente y comparamos el volumen de materia gris entre bilingües y monolingües adultos. Pensamos que la experiencia con dos idiomas y la mayor necesidad de control cognitivo para usar adecuadamente daría lugar a cambios en el cerebro en personas bilingües en español e inglés en comparación con lo observado en las personas monolingües en inglés. Y de hecho se observó mayor materia gris en las regiones frontal y parietal del cerebro de los bilingües, que son las implicadas en el control ejecutivo".
La materia gris del cerebro se ha demostrado que difieren en volumen en función de las experiencias de las personas. Un estudio reveló que los taxistas de Londres tienen más materia gris en áreas del cerebro involucradas con la navegación espacial.
Ante este escenario, el equipo dio un paso más. "Nuestro objetivo era abordar si la gestión constante de dos lenguas habladas conduce a ventajas cognitivas y a una materia gris más grande que habíamos observado en los bilingües español-inglés, o si otros aspectos de ser bilingüe, como el amplio vocabulario asociados con tener dos lenguas, podría ser responsable de ello", explica Olumide Olulade, autor principal del estudio y becario posdoctoral en GUMC.
Los investigadores compararon la materia gris en los bilingües de lenguaje de señas americano (ASL) y el inglés hablado con los usuarios monolingües de inglés. Tanto los bilingües español-inglés como los ASL-Inglés y comparten cualidades asociadas con el bilingüismo, como el tamaño del vocabulario. Pero a diferencia de los bilingües de dos idiomas hablados, los bilingües ASL-inglés pueden firmar y hablar al mismo tiempo, lo que permite a los investigadores probar si la necesidad de inhibir la otra lengua podría explicar la ventaja bilingüe.
"A diferencia de los hallazgos para los bilingües español-Inglés, no se encontraron pruebas de una mayor materia gris en los bilingües ASL-Inglés --dice Olulade--. Por lo tanto se concluye que la gestión de las dos lenguas habladas en la misma modalidad, en lugar de simplemente un vocabulario más amplio, conduce a las diferencias que observamos en los bilingües español-inglés".