La pérdida de una proteína del cerebro contribuye al envejecimiento pero un suplemento dietético lo revierte en ratones

Archivo - Ratón de laboratorio.
Archivo - Ratón de laboratorio. - D-KEINE/ ISTOCK - Archivo
Publicado: lunes, 3 abril 2023 7:10


MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El deterioro del la proteína menina del hipotálamo puede desempeñar un papel clave en el envejecimiento, según un nuevo estudio publicado en la revista de acceso abierto 'PLOS Biology'. Los resultados revelan un factor del envejecimiento fisiológico desconocido hasta ahora y sugieren que la suplementación con un simple aminoácido podría mitigar algunos cambios relacionados con la edad.

El hipotálamo ha sido reconocido como un mediador clave del envejecimiento fisiológico, a través de un aumento del proceso de señalización neuroinflamatoria con el paso del tiempo. A su vez, la inflamación promueve múltiples procesos relacionados con la edad, tanto en el cerebro como en la periferia.

Lige Leng, de la Universidad de Xiamen (China), y sus colegas, han demostrado que la menina es un inhibidor clave de la neuroinflamación hipotalámica, lo que les llevó a preguntarse qué papel puede desempeñar en el envejecimiento.

Aquí observaron que el nivel de menina en el hipotálamo, pero no en los astrocitos o la microglía, disminuye con la edad. Para explorar este declive, crearon ratones knockout condicionales, en los que se podía inhibir la actividad de la proteína.

Descubrieron que la reducción de menina en ratones jóvenes provocaba un aumento de la neuroinflamación hipotalámica, fenotipos relacionados con el envejecimiento, como reducciones de la masa ósea y el grosor de la piel, deterioro cognitivo y una modesta reducción de la esperanza de vida.

Otro cambio inducido por la pérdida de menina fue un descenso de los niveles del aminoácido D-serina, conocido por ser un neurotransmisor y a veces utilizado como suplemento dietético que se encuentra en la soja, los huevos, el pescado y los frutos secos. Los autores demostraron que este descenso se debía a la pérdida de actividad de una enzima implicada en su síntesis, que a su vez estaba regulada por la menina.

Los investigadores se plantearon si se podría revertir la pérdida de menima relacionada con la edad los signos del envejecimiento fisiológico. Para comprobarlo, introdujeron el gen de la menina en el hipotálamo de ratones ancianos (de 20 meses).

Treinta días después, observaron una mejora del grosor de la piel y de la masa ósea, así como del aprendizaje, la cognición y el equilibrio, que se correlacionaba con un aumento de la D-serina en el hipocampo, una región central del cerebro importante para el aprendizaje y la memoria. Sorprendentemente, tres semanas de suplementos dietéticos de D-serina pueden inducir beneficios similares en la cognición, aunque no en los signos periféricos del envejecimiento.

Reconocen que queda mucho por aprender sobre el papel de la menina en el envejecimiento, incluidos los procesos previos que conducen a su declive, y queda mucho por aprender sobre el potencial de explotación de esta vía, incluido hasta qué punto puede ralentizarse el envejecimiento fenotípico, y durante cuánto tiempo, y si la suplementación con D-serina puede desencadenar otros cambios, aún por descubrir.

"Especulamos que el declive de la expresión de la menina en el hipotálamo con la edad puede ser uno de los factores impulsores del envejecimiento, y que puede ser la proteína clave que conecte los factores genéticos, inflamatorios y metabólicos del envejecimiento --señala Leng--. La D-serina es una terapéutica potencialmente prometedora para el deterioro cognitivo".

Según apunta, "la señalización de menina en el hipotálamo ventromedial (VMH) disminuye en ratones envejecidos, lo que contribuye a los fenotipos sistémicos de envejecimiento y a los déficits cognitivos. Los efectos de la menina en el envejecimiento están mediados por cambios neuroinflamatorios y la señalización de la vía metabólica, acompañados por la deficiencia de serina en el VMH, mientras que la restauración de la menina en el VMH revirtió los fenotipos relacionados con el envejecimiento", concluye.