MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
Con motivo del Día Universal del Niño, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) pide a todas las administraciones del Estado que protejan los derechos de los niños durante la pandemia y garanticen su derecho a la asistencia sanitaria y a la educación.
Desde el pasado mes de marzo, los pediatras de Atención Primaria señalan que han jugado un papel clave en la atención infantojuvenil, no solo en el seguimiento de los niños y adolescentes con sospecha de infección por COVID-19, sino por cualquier otro tipo de patología que han seguido siendo atendidas por teleconsulta o presencialmente para garantizar la salud de los niños y adolescentes durante toda la crisis.
Asimismo, "manteniendo los programas de vacunación para la prevención de otras enfermedades infecciosas y jugando un papel clave para reducir la presión asistencial en los hospitales durante las semanas más complicadas del mes de marzo y abril".
AEPap ha colaborado de manera constante y coordinada con las autoridades sanitarias, nacionales y autonómicas, participando en grupos de trabajo, así como la elaboración de documentos clave para la atención a la infancia en este periodo; y en estudios científicos sobre la incidencia del SARS-CoV-2 en los menores y su papel en la transmisión de la infección.
En cuanto a la educación, recuerdan que el cierre de las escuelas, decretado con anterioridad al confinamiento general de la población, constituyó una dificultad para muchos niños.
Así la AEPap, entre otras actividades en relación con la defensa de los niños en esta pandemia, elaboró una propuesta para la vuelta de los niños a los colegios, teniendo como premisa que los datos de varios países de la UE que sugerían que la reapertura de escuelas no se ha asociado con importantes aumentos en la transmisión comunitaria.
Por otro lado, han defendido desde el inicio de esta crisis que las salidas de los niños al aire libre, donde las posibilidades de contagio son menores que en los espacios cerrados, con un adulto que garantice su seguridad y por un periodo de tiempo determinado con mascarilla y todas las medidas de prevención necesarias, son seguras y benefician el correcto neurodesarrollo de los menoresiii.
Asimismo, recuerda que la pandemia ha impedido las reuniones familiares de los niños con miembros de su familia no convivientes, como primos y abuelos, que se pudieron hacer en el corto periodo del verano, "pero que nuevamente se desaconsejan ante el nuevo aumento de los casos".
Respecto al derecho a una alimentación y vivienda adecuadas, lamentan que el cese de muchas actividades laborales ha hecho que muchas familias no tengan recursos suficientes para atender a sus hijos como ellos quisieran. "Las ayudas del Gobierno son limitadas y en ocasiones llegan tarde, y hay situaciones familiares que no pueden esperar", recuerdan.