Un estudio internacional asegura que los niños son grandes consumidores y que eligen productos y marcas
MADRID, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
En vísperas de las fiestas de Navidad y la celebración del día de Reyes, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) piden moderación a la hora de regalar juguetes a los niños, ya que, según una reciente encuesta internacional, "son grandes consumidores", que eligen productos y marcas en alimentación, ropa y juguetes.
En este sentido, los pediatras insisten en que no se deben regalar más de dos o tres juguetes y que, se debe fomentar el deseo de percibirlos. Para ello, recomiendan escribir la carta de los Reyes Magos con un sentido educativo. "No hay que hacerla rápidamente, sino que es mejor demorarla, puesto que va a contribuir a aumentar el deseo verdadero hacia alguna cosa, y eso va a acrecentar el valor del juguete recibido. Los juguetes que el niño pide y obtiene enseguida, pierden rápidamente su valor", advierte la pediatra de Atención Primaria en el Centro de Salud de Camas (Sevilla) y miembro de AEPap, Ana Martínez Rubio.
Igualmente, recuerdan que no todos los juguetes funcionan igual, por lo que en función de las edades de los niños, establecen una relación sobre cuántos y qué tipo de juguetes son buenos para cada etapa.
Los menores de un año no necesitan apenas juguetes (pueden manejar como máximo un solo objeto a la vez). "Pueden ser de plástico, tela, goma o madera, fácil de abarcar con sus pequeñas manos, que se pueda chupar y morder, lanzar y pedir, voltear y cambiar de mano", indica Martínez, quién añade que aún así el niño "necesita a una persona que juegue con él y que le mire y le hable. Es muy importante para favorecer la maduración del lenguaje y la sociabilidad".
En cambio, entre 1 y 2 años, los niños necesitan pocos juguetes, ya que sólo pueden sostener dos cosas a la vez con las manos. No obstante, ya están preparados para descubrir relaciones y adquirir habilidades (montar y desmontar, encajar, encontrar similitudes, apilar, derribar, etc.), por lo que las construcciones son un buen ejemplo de los juguetes idóneos para esta etapa.
ESTIMULAR LA IMAGINACIÓN A PARTIR DE LOS 2 AÑOS
Entre los 2 y los 5 años, se recomienda seguir con las construcciones y otros juguetes que estimulen la imaginación. Según los expertos, es preferible un muñeco sin pilas para que todos los efectos los invente el propio niño. "El juego simulado es muy importante en el desarrollo infantil. Para eso son excelentes las cocinitas, los supermercados y los garajes. Es buena edad para iniciar a los hijos en los puzzles y los juegos de mesa que estimulan la memoria. La plastilina y las pinturas ejercitan otras habilidades interesantes y proporcionan placer", sugiere la pediatra.
En la etapa escolar, son muy adecuados los juegos que requieren normas y otros jugadores, para que lo niños "empiecen a jugar en equipo, relacionarse, aprender a perder y ganar, desarrollar razonamientos mentales y pensar más allá de la jugada inmediata. También hay que estimular la lectura", explica Martínez.
Respecto a los juguetes electrónicos, la experta destaca que "constituyen oportunidades para que los niños adquieran habilidades que les van a ser muy útiles, ya que la informática y el mundo virtual ocupan grandes áreas en casi todas las profesiones en la vida actual. La única objeción que se les debe poner es el tiempo que consumen, puesto que atrapan la atención de forma importante. No hay ningún inconveniente en disponer de ese tipo de juguetes, siempre y cuando se limite el tiempo empleado en su disfrute", concluye Martínez.