"Dormir bien y hacer deporte para crecer bien" La hormona del crecimiento y su relación con el sueño y con el deporte en los niños
MADRID, 20 Jun. (EDIZIONES) -
La hormona del crecimiento, también conocida como 'somatotropina' o 'GH' (por sus siglas en inglés, 'Growth Hormone'), es una proteína compuesta por 191 aminoácidos que se produce y secreta en la glándula pituitaria, ubicada en la base del cerebro. Su función principal es la de estimular el crecimiento y el desarrollo del organismo, especialmente durante la infancia y la adolescencia, aunque también cumple roles importantes en el metabolismo a lo largo de toda la vida.
Según nos explica en una entrevista con Europa Press Salud Infosalus el pediatra Gonzalo Pin, que es el coordinador del Grupo de Sueño y Cronobiología de la Asociación Española de Pediatría (AEP), la hormona del crecimiento es esencial durante la infancia para que los niños alcancen una estatura adecuada y un desarrollo corporal normal. Cuenta que la hormona del crecimiento, como su propio nombre indica, estimula el crecimiento de los huesos y de los tejidos.
"Además de aumentar la estatura, la GH regula la producción, el tamaño y la supervivencia de las células, lo que es fundamental para el desarrollo de órganos y de sistemas en crecimiento. Un déficit de esta hormona en la infancia puede provocar una talla baja, y un retraso en el desarrollo físico, mientras que un exceso puede causar gigantismo", asevera este experto.
POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE EL SUEÑO
Precisamente este pediatra experto en sueño infantil destaca que la liberación de la hormona del crecimiento ocurre principalmente durante el sueño profundo, especialmente en el primer tercio de la noche.
"En la infancia y en la adolescencia, la producción de GH es mucho más activa, ya que es el periodo de mayor crecimiento corporal. Es fundamental que los niños tengan un sueño adecuado y profundo, ya que la mayor parte de la hormona del crecimiento se libera durante este periodo. Trastornos del sueño pueden afectar negativamente a su secreción y, por tanto, al desarrollo físico", explica el doctor Pin.
LA IMPORTANCIA DEL EJERCICIO FÍSICO
A su vez, resalta que factores como el ejercicio, el ayuno, el estrés, el estado nutricional, y la presencia de otras hormonas también pueden estimular su secreción. Precisamente, le preguntamos sobre la importancia del ejercicio físico, dado que "es uno de los estímulos naturales más potentes para la liberación de la hormona de crecimiento (GH)": "Tanto el ejercicio aeróbico, como el de fuerza, pueden aumentar sus niveles en sangre, aunque la magnitud y la duración de este aumento dependen de la intensidad, de la duración, y del tipo de actividad realizada".
El ejercicio intenso, especialmente aquel que genera altos niveles de ácido láctico (como el entrenamiento de fuerza con descansos cortos, o el ejercicio aeróbico de alta intensidad), estimula significativamente la secreción de GH, resalta este experto.
Es más, sostiene el coordinador del Grupo de Sueño y Cronobiología de la AEP que el aumento de GH tras el ejercicio es mayor en personas jóvenes y en quienes están menos entrenados, ya que el cuerpo se adapta con el tiempo; mientras que la respuesta hormonal disminuye en atletas experimentados.
ACTIVIDADES FÍSICAS RECOMENDADAS
En este sentido, resalta el doctor Pin que han demostrado ser eficaces para estimular la producción de hormona de crecimiento de forma natural las siguientes actividades físicas:
a) Ejercicio aeróbico moderado a intenso: Correr, trotar, ciclismo, natación, y deportes de equipo como el baloncesto o el voleibol. "El ejercicio aeróbico prolongado (alrededor de 2 horas) puede provocar un aumento significativo en la secreción de GH", apunta.
b) Entrenamiento de fuerza: Levantamiento de pesas, ejercicios de resistencia con cargas altas, y descansos cortos (menos de 60 segundos entre series) favorecen la producción de GH, especialmente cuando se trabaja con ejercicios multiarticulares y se genera mucho ácido láctico.
c) Ejercicios de intervalos de alta intensidad (HIIT): Alternar periodos cortos de esfuerzo máximo con descansos breves es muy efectivo para estimular la liberación de GH.
d) Actividades de estiramiento y de flexibilidad: Yoga, estiramientos, y danza también pueden contribuir, aunque en menor medida, al favorecer el crecimiento y la buena postura.
Eso sí, este pediatra y portavoz de la AEP lo tiene claro y zanja que realmente "no existe un único deporte que sea claramente superior para estimular la hormona de crecimiento", si bien sí afirma que sí hay disciplinas que destacan por su eficacia y lo resume así:
· Alta efectividad para estimular GH: baloncesto y voleibol por los saltos y estiramientos frecuentes; así como la natación, por el ejercicio completo y de bajo impacto.
· Moderada efectividad para estimular GH: Ciclismo, ya que favorece el desarrollo de las piernas; yoga y estiramientos porque mejoran la flexibilidad y la postura.
· Muy alta efectividad para estimular GH: Entrenamiento de fuerza por las cargas altas y los descansos cortos; HIIT, por la alternancia de alta intensidad y pausa.