MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
Fumar cannabis aumenta el riesgo de desarrollar síntomas depresivos, según una investigación realizada por el Behavioural Science Institute de la Radboud University Nijmegen, en Países Bajos, y publicada 'on line' en 'Addiction Biology'. Dos tercios de la población tienen variantes genéticas asociadas a la depresión.
El cannabis aumenta el riesgo de desarrollar esquizofrenia y psicosis. Además, se creía que podía aumentar el riesgo de desarrollar una depresión, pero no existían evidencias claras sobre esta relación hasta la fecha.
El investigador Roy Otten, del Behavioural Science Institute de la Radboud University Nijmegen, sospechaba que esta falta de evidencias sobre el uso del cannabis y la depresión se debía, en parte, a que anteriores investigaciones olvidaron considerar la vulnerabilidad genética individual frente a la depresión.
Para realizar su investigación, Otten recogió, durante un periodo de cinco años, datos de un total de 428 familias y de sus hijos adolescentes. Cada año, los niños respondían un cuestionario sobre temas como sus conductas y síntomas depresivos.
Asimismo, se determinó en esta muestra la variante del gen de la serotonina (5-HTT) responsable del aumento de la vulnerabilidad a desarrollar depresión. En jóvenes con una variante especial del gen, el consumo de cannabis llevó a un aumento de los síntomas depresivos.
"El efecto es fuerte. Permanece, incluso si se tiene en cuenta otra serie de variables que podrían causar este efecto, como el tabaquismo, el alcohol, la educación, la personalidad o el estatus socioeconómico", dice.
"Algunas personas pueden pensar que los jóvenes con una predisposición a la depresión podrían comenzar a fumar cannabis como una forma de automedicarse y que la presencia de los síntomas depresivos es, por tanto, la causa del uso del cannabis", señala.
Sin embargo, según el investigador, "a largo plazo, definitivamente, este no es el caso". "Aunque el efecto inmediato del cannabis puede ser agradable y causar un sentimiento de euforia, a largo plazo hemos observado que el consumo de cannabis lleva a un aumento de los síntomas depresivos en los jóvenes con un genotipo específico", concluye.