MADRID, 14 Sep. (EDIZIONES) -
El período estival conlleva que las personas relajen sus horarios y sus rutinas no sólo en el ámbito laboral, sino también en otros aspectos, como la dieta o el ejercicio físico. Estas circunstancias, sumadas al hecho de que en septiembre se suelen fijar objetivos de cambio vital, implican que los gimnasios se llenen tras las vacaciones o que las personas retomen su actividad física.
El presidente de la Sociedad Española de Medicina del Deporte (SEMED-FEMEDE), el doctor Pedro Manonelles, cuenta en una entrevista con Infosalus que "en el verano se suele realizar el período de descanso vacacional" y "hace una temperatura muy elevada", lo que implica que "en la mayor parte de deportes no hay período competitivo regular".
Todos estos factores "contribuyen a relajarse en cuanto a la realización de actividad física y deportiva", confirma el también director de la Cátedra Internacional de Medicina del Deporte de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM), que también destaca la ganancia de peso que suele suponer el período estival.
"El hecho de disminuir la actividad física y relajarse respecto a las comidas tomando alimentos más calóricos como helados y dulces tiene como consecuencia una ganancia de peso", apunta el doctor Manonelles.
Pero retomar la actividad física puede no ser fácil. "Para las personas que les cuesta seguir un programa de actividad física, efectivamente supone una dificultad para el retorno", apunta el director de SEMED-FEMEDE, que señala que esta dificultad puede suponer también "el abandono de la actividad física". Sin embargo, "este efecto es mucho más improbable en deportistas habituales", matiza el director de la cátedra de la UCAM.
"Este abandono es especialmente importante en las personas que necesitan hacer ejercicio por motivos de salud", continúa el doctor Manonelles, ya que "los beneficios del ejercicio sólo se consiguen si se mantiene la actividad".
Existe, asimismo, cierto riesgo de lesionarse en la vuelta al ejercicio físico. "Siempre que hay modificaciones del programa de actividad físico-deportiva existe riesgo de lesiones", especifica el experto.
Lo más habitual en el contexto del reinicio de la actividad física es que aparezcan agujetas. Las agujetas, "cuyo nombre técnico es dolor muscular de origen tardío", puntualiza el doctor Manonelles, están causadas por "el exceso de trabajo muscular". Sin embargo, son útiles. "Al provocar dolor limitan la posibilidad de lesión hasta que el organismo se va habituando de nuevo a la actividad", expone el doctor Manonelles.
PAUTAS PARA COMENZAR
En este contexto, el director de SEMED-FEMEDE proporciona una serie de consejos para retomar la actividad física tras el período estival. En primer lugar, el doctor Manonelles se refiere a comenzar de manera progresiva, "de menos a más hasta alcanzar un nivel óptimo".
"Es decir, empezar con ejercicio suave con intensidad baja o moderada y con un tiempo limitado al principio, para ir incrementando la intensidad y el tiempo de entrenamiento de forma progresiva", señala el experto.
Por otra parte, el doctor Manonelles también recomienda una alimentación e hidratación adecuadas, reposo entre las fases del entrenamiento, reposo entre entrenamientos suficiente para una buena adaptación, calentamiento y estiramientos.
Por último, recuerda la necesidad de realizarse un reconocimiento médico-deportivo, algo "imprescindible" para las personas que nunca han realizado ejercicio físico y desean comenzar, además de la necesidad de contar con un profesional que dirija el plan de actividad física para las personas que se encuentren en esta última situación.