MADRID 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
Aunque las infecciones graves pueden transmitirse desde los órganos donados, el riesgo de transmitir la enfermedad del virus del ébola de un donante de órganos a un receptor es extremadamente pequeño. En un nuevo editorial publicado en 'American Journal of Transplantation', los expertos explican cómo simples evaluaciones de los donantes pueden ayudar a asegurar que el suministro de órganos es seguro, teniendo poco impacto en el número de donantes.
Al examinar a todos los donantes de órganos por posibilidad de infección, en raras ocasiones un donante de órganos transmitirá una infección inesperada a un destinatario. Como recientemente se han producido casos de la enfermedad del virus del ébola en Estados Unidos, los médicos quieren asegurarse de que se tomen las medidas adecuadas para reducir el ya bajo riesgo de que el virus pueda transmitirse sin saberlo del donante al receptor.
Los expertos señalan que se pueden emplear preguntas sencillas, muchas de las cuales ya se hacen, para evaluar si los donantes tienen riesgo de presentar enfermedad del virus del ébola. Además, la inversión en nuevas pruebas de laboratorio probablemente no es práctico ni eficaz.
"Miles de personas mueren en Estados Unidos cada año a la espera de un trasplante de órganos y creemos que es muy importante no reaccionar de forma exagerada al riesgo muy bajo de que un potencial donante pueda tener el virus del ébola y, como consecuencia, descartar innecesariamente órganos que pueden salvar vidas", afirma el autor principal Daniel Kaul, director de la División de Trasplantes en Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Michigan en Ann Arbor, Estados Unidos.
Kaul, también presidente de 'United Network for Organ Sharing's Disease Transmission Advisory Committee', y sus colegas sugieren que las personas que viajaron en las últimas tres semanas a países de África donde el virus del ébola está activo, así como los trabajadores de la salud y otros de Estados Unidos que fueron expuestos recientemente a una persona infectada con el virus no deben donar órganos.
Aunque resulta difícil saber cuánto tiempo debe una persona mantenerse sin donar órganos después de la exposición al virus del ébola, parece razonable un periodo de de 21 días. "Creemos que después del periodo de 21 días, los médicos que cuidan de los pacientes involucrados podrían considerar el uso de esos órganos después de hablar con los potenciales receptores si ese órgano podría ser la mejor oportunidad del destinatario para sobrevivir", afirma Kaul.