MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El parto después de una cesárea puede ser exitoso en más del 90% de los casos y, por lo tanto, puede considerarse una opción razonable tanto para la madre como para el niño, según sugiere un estudio publicado en la revista 'BMC Pregnancy and Childbirth'.
Cuando se les proporcionó información detallada sobre los riesgos y beneficios asociados con las diferentes opciones de parto, las mujeres embarazadas tenían más probabilidades de elegir un parto vaginal después de una cesárea previa en lugar de repetir el parto por cesárea.
El doctor Kaname Uno, autor del estudio con sede en el Toyota Memorial Hospital, en Japón, explica que "las tasas de cesárea están aumentando a nivel mundial con casi la mitad de las decisiones sobre si se debe realizar por cesárea en función de un parto por cesárea anterior".
Según señala, "un ensayo de parto después de la cesárea se considera una opción segura, pero la mayoría de las mujeres que podrían elegirlo se someten a cesárea repetida. Esto puede deberse a una falta de educación suficiente sobre los riesgos y beneficios de ambos tipos de parto".
Los autores analizaron datos de abril de 2005 a agosto de 2017 de 1.086 mujeres embarazadas con al menos un parto por cesárea anterior. De estas, 735 mujeres embarazadas eran elegibles para un trabajo de parto. Se les proporcionaron explicaciones detalladas de los riesgos y beneficios de ambas opciones y se pidió a cada una que tomaran una decisión informada a las 34 semanas de gestación.
"Un riesgo potencial de parto vaginal después de una cesárea previa es la ruptura uterina, que puede ocurrir a lo largo de incisiones curadas de partos por cesárea anteriores --explica el doctor Uno--. Sin embargo, los partos por cesárea conllevan un riesgo de sangrado, infección y otras complicaciones. Los beneficios de un trabajo de parto exitoso incluyen un menor riesgo de sangrado, infección y un mejor resultado para futuros embarazos".
De las 735 mujeres embarazadas, 471 (64,1%) optaron por el parto y 264 (35,9%) por cesárea repetida. Entre las 471 mujeres que eligieron el parto, 430 (91,3%) tuvieron un parto vaginal exitoso, mientras que 41 (8,7%) se clasificaron como 'ensayo de parto fallido' y dieron a luzpor cesárea después de que no pudieron dar a luz vaginalmente debido a complicaciones.
De este grupo, tres mujeres (0,6%) experimentaron ruptura uterina pero no ocurrieron muertes maternas o neonatales. La ruptura prematura de membranas, antes del inicio de las contracciones, y la gestación durante 40 semanas fueron factores de riesgo significativos para el trabajo de parto fallido.
En el estudio, el 96,4% de las mujeres con antecedentes de parto vaginal tuvieron un parto exitoso. Los resultados confirman estudios previos que indican que el parto después de una cesárea puede ser una alternativa segura para repetir partos por cesárea.
El doctor Uno considera que "optar por un parto vaginal después de una cesárea previa puede aumentar la duración de la gestación, con una disminución asociada en el riesgo de posibles complicaciones de salud para el niño".
"Los resultados sugieren que se debe alentar a los profesionales de la salud a tener conversaciones continuas con las futuras madres sobre los riesgos y beneficios asociados con cada modo de parto, lo que les permite tomar sus propias decisiones informadas", añade.
Los autores advierten que, dado que los tamaños de grupo evaluados en el estudio dependen directamente de la elección de cada futura madre, los resultados pueden verse afectados por sesgos individuales, experiencias previas y regionalidad y, por lo tanto, pueden no ser ampliamente generalizables. Como solo tres mujeres experimentaron ruptura uterina, se necesita más investigación para evaluar esto como una posible complicación.