SANTANDER, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y la Fundación Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (IDIVAL) han participado en un estudio, publicado en la revista internacional 'Journal of hepatology', que concluye que los pacientes con obesidad e hígado graso no alcohólico presentan un mayor riesgo tras la infección por COVID-19.
En el trabajo ha participado el doctor Javier Crespo, jefe del Servicio de Digestivo de Valdecilla y responsable del grupo de Investigación Clínica y Traslacional en Enfermedades Digestivas del IDIVAL, que mantiene una colaboración estable con varios de los equipos que lideran este estudio en proyectos de investigación sobre esteatohepatitis no alcohólica o hígado graso, ha informado el Servicio Cántabro de Salud en nota de prensa.
El estudio, liderado por el laboratorio de Molecular Metabolism de Ruben Nogueiras, investigador del Centro Singular de Investigación en Medicina Molecular y Enfermedades Crónicas de la Universidad de Santiago de Compostela (CiMUS y del CIBER de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición-CIBEROBN), y el de Liver Disease de Malu Martínez Chantar (CIC bioGUNE y CIBER de Enfermedades Hepáticas y Digestivas CIBEREHD), ha demostrado que, en los pacientes con obesidad y esteatohepatitis no alcohólica, se identifica una expresión más elevada de ACE2, el receptor celular del virus, y de Tmprss2, una molécula que facilita la unión de las membranas del virus y la célula.
Estos pacientes presentan, por tanto, una maquinaria de entrada del virus "muy eficaz", aumentando su vulnerabilidad en caso de infección. En el estudio se ha identificado que esta maquinaria de entrada del virus no está elevada en pacientes con obesidad y esteatosis (un estadio más leve que la esteatohepatitis) ni en pacientes con obesidad y diabetes tipo 2, enfermedades que también están muy ligadas.
En España la mortalidad por COVID-19 varía entre un 2-6%, pero datos recientes apuntan a que el 80% de los pacientes con forma grave de infección por COVID son obesos. Además, dentro del amplio espectro de síntomas provocados por la COVID-19, un porcentaje considerable de pacientes presentan algún tipo de fallo hepático.
Junto al doctor Crespo, otros colaboradores del estudio han sido Gemma Frühbeck, investigadora de la Clínica Universitaria de Navarra, el CIBEROBN y un consorcio de investigadores internacionales. Los primeros autores del trabajo son los investigadores Marcos F. Fondevila, María Mercado-Gómez, Amaia Rodríguez y María J. González-Rellán.
Actualmente el IDIVAL, centro acreditado por el Instituto de Salud Carlos III, en su labor de promoción y desarrollo de la innovación e investigación en salud en el entorno biosanitario de Cantabria, cuenta con más de 30 grupos de investigación sanitaria y ha gestionado en los últimos 5 años 35 millones de euros dedicados a la investigación.
De esta partida, 25 millones han procedido de proyectos competitivos, acuerdos y donaciones obtenidos por los propios investigadores.