MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
En España hay actualmente más de 2.000 afectados por el déficit de la hormona de crecimiento (GH) aunque, según ha reconocido el presidente de una asociación nacional que agrupa a estos pacientes, Antonio Liger, hay muchos que no están bien diagnosticados ni tampoco tienen garantizado el mejor acceso al tratamiento.
Según ha explicado Liger, este infradiagnóstico se debe a que los síntomas propios de esta enfermedad, como el cansancio, irritabilidad y malestar, son comunes a otras patologías y "muchos de ellos terminan con un diagnóstico de depresión".
A esto se añaden las diferencias en el acceso a las pruebas diagnósticas que se registran según donde vivan, ya que "la deficiencia de la GH sólo se puede realizar en centros especializados y no todas las ciudades disponen de los procedimientos diagnósticos para desarrollarlo".
En lo que respecta al acceso al tratamiento, este colectivo denuncia que, tras la primera candidatura de Madrid como sede olímpica, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) decidió que la dispensación de la hormona pasara de la farmacia al ámbito hospitalario.
Además, aseguran que cada año los afectados deben presentarse a un comisión de control donde se valida si necesitan el medicamento, algo que no sucede con otros enfermos crónicos como los diabéticos o las personas con hipertensión arterial.
"Estamos viviendo situaciones donde por la falta de un papel o una prueba, se nos niega el tratamiento", denuncia Liger.
Pese a que entienden que se debe controlar al máximo la utilización indebida de la hormona de crecimiento, esta asociación de afectados califica de "incomprensible" que se dificulte este acceso cuando "a través de Internet existe un mercado de medicamentos falsificados de hormona de crecimiento no regulado".