Ópticos advierten de que películas en 3D pueden causar mareos y visión doble a personas con pequeños problemas visuales

Actualizado: lunes, 1 febrero 2010 14:32

VALENCIA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunidad Valenciana advirtió hoy de que las películas en 3D pueden provocar mareos, visión doble y desequilibrios en personas con pequeños problemas visuales y recomendó a aquellas personas que sufran alguno de estos síntomas viendo una proyección de estas características que se realicen una revisión binocular.

Según informó la institución colegial en un comunicado, la creciente popularidad del cine en tres dimensiones permite a los espectadores la posibilidad de ver las películas "de una forma espectacular" aunque advirtió de que no todas las personas "pueden disfrutar de esta técnica, ya que existen algunos problemas visuales bastante frecuentes, como la ambliopía y el estrabismo, que pueden impedir" que los afectados disfruten del efecto 3-D.

El Colegio de Ópticos señaló que la tecnología 3-D es "muy similar" a la técnica que utiliza el cerebro para ver en relieve. Se basa en dos imágenes superpuestas que se proyectan sobre una pantalla. Cada ojo observa una de las imágenes y luego el cerebro del espectador las fusiona obteniendo una imagen tridimensional.

Según los expertos, esta disociación de imágenes de la película "puede suponer un esfuerzo adicional para el cerebro, que da instrucciones a la musculatura ocular para que la alineación de ambos ojos sea la correcta, permitiendo verlo bien". Sin embargo, la entidad explicó que si hay un problema "latente", como es el caso de una foria, "es posible que se manifieste visión doble, mareos, e incluso náuseas o desequilibrios en personas que estén de pie".

En este sentido, el colegio de Ópticos señaló que para entender por qué se manifiestan estos problemas es necesario comprender la importancia de ver bien con los dos ojos. "La visión binocular es una capacidad innata del ser humano que nos permite ver el mundo en tres dimensiones, lo cual nos ayuda a calcular mentalmente las distancias o a situar los objetos en el espacio", explicó, y añadió que cada ojo captura una imagen que se fusionan en el cerebro y obtiene una única imagen en tres dimensiones. Para conseguirlo, es necesario que ambos ojos estén sincronizados y, para ello, los músculos del ojo deben trabajar juntos.

Si los ojos no trabajan sincronizadamente, se produce una rotura en la fusión de las imágenes en el cerebro, lo que se conoce como foria, es decir, un estado de relajación en el que los ojos pierden momentáneamente la coordinación de uno con el otro, manteniendo el estímulo visual, pero sin que exista integración en el cerebro. Se trata de un problema "muy habitual" que se suele compensar con la propia musculatura del ojo, que trabaja para que ambas imágenes coincidan.

En algunos casos, la musculatura no puede compensar este defecto y se produce una relajación total que conocemos como estrabismo. Esta alteración visual provoca que los ojos no miren a un mismo punto, es decir, que no trabajan de forma armónica y simultánea. En estos casos, "la persona no es capaz de ver las películas en 3D, porque, de hecho, tampoco tiene visión en relieve habitualmente", advirtió.

Como ejemplo, la entidad señaló que es similar, a lo que les ocurre a las personas sordas de un oído, que no pueden percibir el sonido en estéreo. Tampoco puede haber visión estereoscópica o tridimensional en aquellos casos en los que uno de los dos ojos no envía la información adecuada al cerebro. Esto se produce en personas que tienen ambliopía, también conocida como 'ojo vago'.

En este caso, el cerebro trabaja con la imagen de un solo ojo, por lo que no se produce la fusión de las imágenes impidiendo la imagen tridimensional.

El COOCV aconsejó visitar al óptico-optometrista si siente algún malestar viendo una película con tecnología 3-D porque es posible que tenga un pequeño problema de visión binocular (foria) que hasta ahora ha pasado desapercibido. Asimismo, especificó que las personas que usen corrección óptica (gafas, lentes) deben utilizarlas debajo de las gafas de 3-D, pero indicó que, si se tiene una foria, ésta se puede manifestar a pesar de llevar corrección.

Asimismo, subrayó que es posible que durante los primeros minutos de la película se pueda sentir un "pequeño malestar", que es el tiempo que los ojos necesitan para adaptarse. Cuando el cerebro entiende finalmente lo que está ocurriendo y la coordinación con la musculatura ocular se equilibra, es cuando se puede disfrutar de la película.