MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El director Regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa, Hans Henri P. Kluge, y el ministro de Salud de Italia, Roberto Speranza, han firmado una declaración conjunta, tras una reunión de alto nivel con representantes de los Estados miembro, en la que instan a los países europeos a facilitar clases 'on line' y garantizar el uso de mascarillas en colegios.
Y es que, el Covid-19 ha creado la mayor disrupción de los sistemas educativos en la historia, afectando a casi 1,6 mil millones de estudiantes en más de 190 países, incluido Europa. "La mayoría de los países de la Región cerraron las escuelas para ayudar con la contención del virus. Si bien esto fue vital, a medida que avanzamos hacia la reapertura, ahora debemos determinar cómo abrir escuelas en la Región de manera segura", han dicho los expertos.
Aunque los niños pueden contraer y transmitir el Covid-19, en gran medida se han librado de los efectos directos del virus en la salud, y la mayoría de los casos de Covid-19 en niños son leves o asintomáticos. A pesar de esto, continúan viéndose afectados negativamente por el cierre de escuelas, tanto en términos de su educación como de su salud, incluida su salud mental, desarrollo social y el riesgo y el impacto de estar en un entorno familiar abusivo.
"Los efectos nocivos de la pandemia no se han distribuido por igual. Los niños que viven en situaciones vulnerables continúan viéndose afectados de manera desproporcionada en relación con sus resultados de salud a largo plazo y los desafíos del aprendizaje a distancia, tanto debido a la pobreza digital como a las dificultades para que los padres puedan ayudar en el proceso de aprendizaje. Los desafíos para acceder al apoyo educativo también han sido más profundos para los niños con problemas de salud subyacentes y los niños que viven con discapacidades", señalan los expertos.
Por ello, han avisado de que las medidas de protección relacionadas con la higiene de las manos, el distanciamiento físico, el uso de mascarillas cuando corresponda y la permanencia en casa en caso de enfermedad son "piedras angulares" de una escolarización segura dentro de la realidad Covid-19. Además, han abogado por implementar políticas específicas para los niños en riesgo con necesidades especiales de aprendizaje o condiciones de salud, así como para los educadores con condiciones de salud que los hacen vulnerables a infecciones más graves.
"Es realista preparar y planificar para que el aprendizaje en línea esté disponible para complementar el aprendizaje en la escuela en el próximo año escolar. Esto será necesario durante cierres temporales, puede ser una alternativa para los niños y educadores con problemas de salud, puede ser necesario durante la cuarentena episódica y puede complementar el aprendizaje escolar en circunstancias en las que los niños alternan la presencia escolar para respetar las necesidades de distanciamiento físico en aulas más pequeñas", han añadido.
Dicho esto, han destacado la importancia del vínculo entre los sectores de la salud y la educación seguirá creciendo a medida que navegamos por la nueva realidad posterior al Covid-19. "Estamos comprometidos a trabajar en todos los sectores para satisfacer las necesidades de los niños", han aseverado.