MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra y del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) han descubierto mecanismos que contribuyen a la respuesta antitumoral del sistema inmune.
Las células presentadoras de antígeno son las encargadas de iniciar y regular la respuesta inmunitaria frente a patógenos y tumores. Sin embargo, los tumores desarrollan mecanismos para escapar a su control silenciando la respuesta de los linfocitos T citotóxicos que eliminan el tumor.
En los últimos años se ha visto que el uso de anticuerpos "inmunoactivadores" capaces de reactivar los linfocitos T citotóxicos silenciados es capaz de estimular una respuesta anti-tumoral potente. Y en este trabajo, que publica la revista científica 'Cancer Discovery', han visto que la generación de células T citotóxica que pueden ser 'rescatadas' por la inmunoterapia con anticuerpos anti-PD1 y anti-CD137 depende de una subpoblación concreta de células presentadoras de antígenos.
Estas son células dendríticas dependientes del factor de transcripción Batf3, que "toman antígenos de las células tumorales y lo presentan a los linfocitos T, que así adquieren capacidad para matar al tumor", ha explicado Ignacio Melero, investigador del CIMA y codirector del trabajo.
Recientemente los anticuerpos anti-PD-1 han demostrado su eficacia para el tratamiento del melanoma metastásico y del cáncer de pulmón no microcítico en primera línea.
Según David Sancho, investigador del CNIC y codirector del estudio, "esclarecer la célula presentadora que promueve la respuesta inmune anti-tumoral puede ayudarnos a diseñar estrategias para incrementar la eficacia del tratamiento con anticuerpos inmunoactivadores y a buscar biomarcadores que predigan qué pacientes se beneficiarán del tratamiento. Nuestro trabajo sugiere que estas células dendríticas dependientes de Batf3 pueden ser fundamentales en la inmunoterapia anti-tumoral".
OBTENER CÉLULAS DE PACIENTES ONCOLÓGICOS
Para su aplicación clínica, los investigadores del CIMA y de la Clínica Universidad de Navarra coordinan un proyecto europeo en el que también participa el CNIC para obtener estas células presentadoras de antígeno de la sangre de pacientes con tumores mediante técnicas de selección celular y formular vacunas específicas para el tumor del paciente.
"Hemos visto que su número aumenta al utilizar un factor de crecimiento denominado FLT-3L y mediante este agente podríamos incrementar su número en pacientes que estén recibiendo anticuerpos anti-PD-1 o anti-CD137 para potenciar la eficacia mediante un tratamiento combinado", ha explicado Melero
Si se confirman los resultados, los investigadores se plantean la utilización de estas células en terapia celular. "Queremos estudiar también si este mecanismo es deficitario en los pacientes que no responden al tratamiento con anti-PD-1. Nuestra hipótesis es que la respuesta a anti-PD-1 correlaciona con la presencia de esta subpoblación de células dendríticas en el tejido tumoral", reconocen ambos autores.
En un artículo publicado en el mismo número de la revista científica, el investigador Daniel Speiser destaca la importancia de los hallazgos de el estudio español de cara a conseguir "mayor eficacia en inmunoterapias del cáncer que están ya aprobadas para uso clínico y desarrollándose para múltiples indicaciones en oncología".