Una nueva vía para detectar de forma más precisa el TDAH

Archivo - Niño realizando el test AULA para la detección de la TDAH
Archivo - Niño realizando el test AULA para la detección de la TDAH - FLICKER/COM SALUD - Archivo
Publicado: viernes, 7 enero 2022 18:51

MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -

Mediante el análisis de las fluctuaciones de diferentes estados cerebrales, los neurocientíficos del Centro Nacional de Investigación Synapsy (Suiza) han identificado un nuevo marcador neurológico del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).

Los resultados, publicados en la revista 'Biological Psychiatry: Cognitive Neuroscience and Neuroimaging', aportan pruebas de un biomarcador más sólido del TDAH y contribuyen así a que la psiquiatría se convierta en una disciplina médica más precisa.

El TDAH afecta al cinco por ciento de los adultos, lo que lo convierte en uno de los trastornos psicológicos más comunes. El diagnóstico clínico actual se basa únicamente en cuestionarios que se centran principalmente en los síntomas de inatención e impulsividad.

Sin embargo, los neurocientíficos especulan que las causas del TDAH, aunque todavía no se conocen bien, tienen una base biológica y genética, lo que sugiere que podrían existir biomarcadores que ayuden a su diagnóstico.

Este fue el objetivo de este nuevo estudio apoyado por Synapsy, un centro de investigación que ha combinado la psiquiatría y las neurociencias durante los últimos doce años para comprender las bases neuronales de diferentes trastornos psicológicos con la esperanza de crear mejores medios para diagnosticarlos y tratarlos.

Con el apoyo de la Universidad de Ginebra (UNIGE), el Centro de Imágenes Biomédicas (CIBM) y el Hospital Universitario de Ginebra (HUG), centraron su atención en un nuevo enfoque electroencefalográfico denominado microestados para identificar las 'firmas neurológicas' del TDAH.

La técnica de los microestados se utiliza para observar los aspectos espaciales y temporales combinados de la actividad cerebral. Mediante esta técnica, el equipo de investigación descubrió que un determinado estado de actividad cerebral asociado al sueño y la atención duraba más tiempo entre las personas con TDAH.

EN BUSCA DE UNA MEJOR HERRAMIENTA DE INVESTIGACIÓN

Los electroencefalogramas (EEG), una prueba utiliza una red de sensores de electrodos colocados en el cuero cabelludo del sujeto para medir los campos eléctricos generados por las redes neuronales a gran escala, podrían servir para detectar el TDAH.

De hecho, estudios recientes han revelado una actividad anormal del EEG entre los pacientes afectados por el TDAH, lo que sugiere que un desarrollo cerebral anormal puede ser la causa del TDAH.

Con todo, los datos varían demasiado de un estudio a otro, lo que los convierte en marcadores poco fiables del TDAH. "Estas variaciones se deben, bien a la gran heterogeneidad de las causas del TDAH, bien a que los análisis tradicionales del EEG no son una buena herramienta para profundizar en la materia, ya que no tienen en cuenta los aspectos espacio-temporales de los estados cerebrales", señala Tomás Ros, investigador del Departamento de Psiquiatría y Neurociencia de la Facultad de Medicina de la UNIGE.

LOS MICROESTADOS CEREBRALES REVELAN DOS BIOMARCADORES

La actividad cerebral fluctúa sucesivamente de un estado a otro mientras está en reposo, manifestando diferentes configuraciones espaciales en el campo eléctrico del EEG. Los neurocientíficos hablan sobre todo de cinco 'micro' estados o configuraciones principales, que van de la A a la E.

Estos diferentes estados permanecen estables durante unos cien milisegundos y cambian de uno a otro, de ahí su nombre de 'microestados'. Un electroencefalograma puede detectarlos y extraer de las grabaciones su frecuencia, duración y orden de aparición.

Utilizando este enfoque, los investigadores encontraron diferencias entre pacientes adultos con y sin TDAH. El 'microestado' cerebral A parece tener una duración más corta entre los pacientes diagnosticados de TDAH.

"Al comparar esta observación con los datos de los cuestionarios clínicos, observamos que este estado está inversamente correlacionado con los síntomas de falta de atención", afirma Víctor Férat, investigador del Laboratorio de Mapeo Cerebral Funcional y primer autor del estudio.

Curiosamente, el equipo observó que el microestado D tenía una duración más larga en los pacientes con TDAH, y que esto se asociaba a una mayor alteración del sueño, un síntoma típico del TDAH.

FIABILIDAD CONTROLADA

Al igual que los hallazgos científicos deben ser reproducidos sobre el terreno, el equipo de investigación repitió sus análisis con una cohorte distinta de pacientes para verificar la generalizabilidad de sus hallazgos.

En colaboración con el profesor Martijn Arns, director del instituto Brainclinics de los Países Bajos, la primera recopilación de datos de sesenta y seis pacientes diagnosticados de TDAH y sesenta y seis personas del grupo de control fue validada por otra cohorte de veintidós pacientes con TDAH y veintidós sujetos de control, registrados en el HUG por la unidad de TDAH dirigida por el profesor Nader Perroud, coautor del estudio. "En este caso, hemos replicado los resultados relativos al microestado D, pero no los del microestado A", afirma Victor Férat.

Por tanto, el microestado D parece ser un biomarcador cerebral replicable para el TDAH. Además, parece estar asociado con el trastorno del sueño en esta población, un aspecto clave del TDAH. Estos hallazgos revelan así una valiosa herramienta para la investigación, el diagnóstico e incluso el tratamiento. "Este biomarcador podría ser monitorizado en tiempo real durante el entrenamiento cerebral con 'neurofeedback', por ejemplo", concluye Ros.