Una nueva investigación podría cambiar la forma en que se tratan las conmociones cerebrales

Cerebro
Cerebro - PIXABAY/WEKSART - Archivo
Publicado: lunes, 14 octubre 2019 7:55

   MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Las lesiones cerebrales traumáticas (LCT), incluidas las conmociones cerebrales, pueden ser causadas por cualquier cosa, desde lesiones deportivas hasta traumas en el campo de batalla. Y pueden tener efectos fatales o duraderos. Los resultados de una conmoción cerebral grave (problemas con el pensamiento, la memoria, el movimiento, las emociones) están claros, pero las causas o mecanismos patológicos subyacentes, nolo están tanto.

   Un nuevo estudio cuestiona la hipótesis habitual de que el golpe que provoca una lesión cerebral traumática causa daño nervioso o lesión axonal. Un equipo de investigadores, dirigido por el profesor del Laboratorio Cold Spring Harbor Partha Mitra, ha encontrado ahora más evidencia de daño en los vasos sanguíneos que de daño a los nervios, después de realizar exploraciones post mortem en un cerebro lesionado. Estos hallazgos podrían influir en el tratamiento y el desarrollo de nuevos medicamentos para la lesión cerebral traumática.

   "El daño a los nervios después de lesiones cerebrales traumáticas ha sido un punto de vista mayoritario, y la terapia, así como el desarrollo de fármacos, se han dirigido hacia ese objetivo --explica Mitra--. La idea es que si el mecanismo es realmente diferente, la intervención terapéutica también puede ser diferente".

   El laboratorio de Mitra trabajó en la investigación con colegas de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, el Instituto Nacional de Enfermedades Neurológicas y Accidentes Cerebrovasculares, la Universidad de Maryland, el Centro de Neurociencia y Medicina Regenerativa y la Universidad de Servicios Uniformados de Ciencias de la Salud que habían estado estudiando cerebros humanos de pacientes fallecidos mediante resonancia magnética.

   El equipo de CSHL realizó un análisis más detallado del tejido cerebral postmortem utilizando un procedimiento neurohistológico de alto rendimiento (un conjunto de técnicas para etiquetar y visualizar cortes cerebrales) que Mitra desarrolló para estudiar el cableado de los cerebros de los ratones.

   Con la resonancia magnética, la resolución se limita a varios cientos de micras, lo que dificulta discernir si se han producido lesiones de la fibra nerviosa (axonal) o de los vasos sanguíneos (vasculares), explica Mitra. El análisis digital del tejido postmortem a una resolución de micras, correlacionado con la resonancia magnética, permitió al equipo ver la lesión vascular con mayor claridad.

   Mitra se centró en las áreas que rodean las lesiones, o donde el trauma dejó una huella física en el cerebro. Aparecieron en las imágenes de resonancia magnética como "manchas negras". El equipo utilizó una mancha de hierro (que aparece en azul) para detectar la presencia de sangre y una mancha de mielina para detectar la presencia de fragmentos de fibras nerviosas en las muestras del cerebro.

   Vieron una cantidad significativa de células sanguíneas marcadas con hierro en el área donde se encontraba la lesión en la muestra del cerebro, lo que indica microhemorragias traumáticas causadas por rupturas a lo largo de los vasos sanguíneos a través del cerebro. Los investigadores no observaron ningún daño nervioso significativo por las manchas de mielina.

   Si bien los investigadores no pudieron descartar por completo que los pacientes con TMB también sufrieran lesiones axonales, concluyeron que la lesión vascular traumática es una característica distintiva de las micro hemorragias traumáticas y podría ser un objetivo para nuevas terapias.

   El equipo también descubrió que las microhemorragias traumáticas a menudo predicen problemas de salud y discapacidades futuras para las personas con lesión cerebral traumática, pero no pudieron determinar la dirección de la relación entre las microhemorragias y lesiones agudas. Esas microhemorragias podrían ser simplemente una señala de una lesión más grave, o podrían causar un peor resultado.

   Debido a esto, el equipo cree que se necesitan experimentos de seguimiento para identificar las causas y los efectos subyacentes de la lesión cerebral traumática para un mejor diagnóstico, pronóstico, identificación de objetivos terapéuticos y mejora de los resultados del paciente.