LONDRES, 22 Abr. (Reuters/EP) -
Investigadores de la Universidad de Groningen (Países Bajos) han descubierto que los niños que nacen de forma prematura tienen más riesgo de desarrollar problemas emocionales y de conducta cuando comienzan a ir al colegio, según los resultados de un estudio publicado en la revista 'Pediatrics'.
Estudios previos han revelado que estos niños suelen tener más riesgo de déficit de atención e hiperactividad, ansiedad, depresión y problemas sociales, según reconocen los autores. Pero ahora han visto que cuando comienzan el colegio, entre los 4 y 5 años, tienen mayores tasas de problemas emocionales y de conducta que incluso pueden volverse más persistentes, ha explicado Jorijn Hornman, autor del estudio.
Los investigadores utilizaron datos de un estudio holandés con niños nacidos en 2002 y 2003, entre los que había 401 que lo hicieron entre la semana 25 y 31 de gestación, 653 entre la semana 32 y 35, y 389 que nacieron a término.
Cuando tenían 4 y 5 años, vieron que el 7 por ciento de los niños prematuros tenían problemas emocionales o de conducta, frente a menos del 4 por ciento de quienes nacieron a término. En cambio, fue similar el porcentaje de quienes presentaban estos problemas sólo a los 4 años y se resolvían al año siguiente.
Los autores vieron que cuanto antes naciera el niño mayor era el riesgo de desarrollar estos problemas. Además, en el 8 por ciento de los bebés que nacían más pronto estos problemas eran más recurrentes un año más tarde.
"La persistencia de un problema suele indicar que se trata de algo crónico, y otras investigaciones apuntan a que incluso pueden prolongarse hasta la adolescencia", ha añadido Dieter Wolke, de la Escuela Médica de Warwick (Reino Unido), que no ha participado en el estudio.
En el estudio fue menos frecuente que a los 5 años aparecieran problemas de conducta que no existían un año antes, algo que sucedió en el 4 por ciento de los niños prematuros y en el 2 por ciento de los nacidos a término.
PODRÍA DEBERSE A UNA ALTERACIÓN EN EL DESARROLLO DEL CEREBRO
Hornman explica a Reuters que el cerebro del feto se desarrolla muy rápido en las últimas semanas del embarazo, sobre todo a la hora de diferenciar las redes neuronales que se acaban de formar, por lo que "el parto prematuro puede alterar ese proceso" y aumentar el riesgo de estos trastornos a largo plazo.
Con el agravante, añade, de que estos problemas podrían tener un gran impacto en el rendimiento escolar y su relación con otros niños, por lo que su detección precoz puede ayudar a los padres y los profesionales a estar a atentos y tomar medidas antes de que comiencen el colegio.
"Estos hallazgos pueden ayudar a determinar antes de entrar a la escuela si los niños prematuros serán más propensos a sufrir problemas emocionales y de comportamiento al asistir a la escuela", dijo Hornman.
Además, cree que la "buena noticia" de su trabajo es que, como han visto, la gran mayoría de estos niños no sufren estos problemas cuando comienzan el colegio.