MADRID 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los niños cardiópatas hospitalizados por bronquiolitis aguda por VRS tienen un riesgo 17 veces más alto de mortalidad y 4 veces superior de reingresar que los niños sanos, según han asegurado expertos con motivo de la celebración de la II Jornada de la Sociedad Española de Cardiología Pediátrica y Cardiopatías Congénitas (SECPCC).
"Es un momento para compartir vivencias y experiencias sobre todo de los aciertos en el manejo de los niños, adolescentes y adultos con cardiopatías congénitas. También a veces es importante aprender de los errores y es evidente que hay que avisar al resto de los compañeros qué cosas debemos evitar para que no vuelvan a ocurrir", ha aseverado la presidenta de la SECPCC y cardióloga pediátrica del Hospital Materno-Infantil Vall d'Hebron, Dimpna C. Albert.
En concreto, una cardiopatía congénita es una malformación de la anatomía normal del corazón. Son, por tanto, son anomalías estructurales y existen múltiples tipos. "Algunas son variaciones anatómicas leves con poca repercusión, pero otras son más complejas que provocan alteraciones a nivel de la cantidad de sangre que va a los pulmones, o bien provocan mezcla de sangre desoxigenada con la sangre arterial lo que condiciona que el niño esté azul o cianótico", ha explicado.
Así, prosigue, dependiendo de la cardiopatía el efecto de ésta sobre la salud del neonato es importante. Y es que, algunas requieren de una cirugía en periodo neonatal, que aunque no le impida hacer una vida relativamente normal, son niños que necesitarán de seguimiento de por vida.
"Actualmente se pueden diagnosticar durante la gestación mediante una ecocardiografía al feto, en general a partir del quinto mes de embarazo. Respecto a su manejo, nos preocupa dar una atención adecuada a los niños, con las últimas innovaciones técnicas y de tratamiento para conseguir la mayor supervivencia, con la mejor calidad de vida", ha recalcado la doctora. Por ello, desde la SECPCC, con el apoyo de la Asociación Española de Pediatría (AEP), han reivindicado el reconocimiento de la subespecialidad en cardiología pediátrica.
FACTOR DE RIESGO PARA INFECCIONES RESPIRATORIAS AGUDAS POR VRS
Asimismo, entre la diversidad de temas abordados, el jefe de Sección de Cardiología Pediátrica en el Hospital Universitario Gregorio Marañón y miembro de la SECPCC, Constancio Medrano, ha sido el encargado de presentar la ponencia '¿Qué hemos aprendido sobre VRS en cardiología pediátrica en la última década?'.
Este virus es la primera causa de infección respiratoria aguda grave en forma de bronquiolitis y el principal motivo de ingreso en la edad pediátrica. Se trata de un patógeno de fácil contagio del que existen muestras durante todo el año en nuestro país, siendo entre octubre y marzo los meses con mayor índice epidémico y que está asociado a una alta morbilidad y hospitalización en niños menores de dos años.
En España, entre el 0,5 por ciento y el 2 por ciento de los afectados son hospitalizados, aunque esta tasa de hospitalización llegar a ser del 13 por ciento en niños considerados de alto riesgo como los niños con cardiopatías congénitas.
Además, cuando estos bebés son hospitalizados por Bronquiolitis Aguda por VRS (BAVRS) tienen un riesgo 17 veces más alto de mortalidad y 4 veces superior de reingresar que los niños sin factores de riesgo, siendo la mortalidad en los niños con factores de riesgo ingresados por BAVRS mayor que el de cualquier otra causa de hospitalización.
"Para un bebé con una cardiopatía congénita, la infección por VRS añade un estrés adicional a su ya vulnerable sistema cardiopulmonar. De hecho, las infecciones respiratorias agudas como la bronquiolitis por VRS incrementan la morbilidad y mortalidad y retrasan intervenciones programadas o las complican en estos bebés", ha zanjado Medrano.