Denuncia la "relajación" en la aplicación de la Ley según que CC.AA y pide que se financien tratamientos y se creen unidades especializadas
SEVILLA, 27 May. (EUROPA PRESS) - El presidente de la Asociación de Neumólogos del Sur (Neumosur), Francisco Álvarez, abogó hoy por establecer nuevas medidas fiscales que "encarezcan" el tabaco, toda vez que insistió en la "necesidad imperiosa" de que este hábito pernicioso "se prohíba en todo el sector de la hostelería, incluso en los bares y restaurantes de menos de 100 metros cuadrados". En declaraciones a Europa Press, el presidente de Neumosur, Francisco Álvarez, que lamentó que España tiene uno de los precios de venta al público "más bajos de Europa", aludió a recientes estudios que han medido cómo se comporta el consumidor ante las continuas subidas del precio del tabaco, "constatándose una relación directa entre ambos parámetros, de tal forma que una mayor fiscalidad de este producto conlleva un descenso de su consumo". De hecho, este especialista detalló que, por cada diez por ciento que sube el precio de venta al público del tabaco, disminuye la prevalencia de tabaquismo en los adolescentes entre un siete y un diez por ciento. En cuanto a la prohibición de fumar en cualquier espacio público cerrado, en referencia fundamentalmente al sector de la hostelería, destacó que este medida "tendría un efecto beneficioso a corto plazo con la reducción de la prevalencia en la población general". Así, se refirió igualmente a un reciente informe elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que revela que dicha prohibición "consigue que se disminuya en un 16 por ciento el consumo de tabaco". De igual modo, advirtió de que en el sector español de la hostelería "hay unos 800.000 empleados", una parte de los cuáles "tienen que sufrir el tabaquismo pasivo", lo que lo convierte "en un verdadero problema de salud pública", enfatizó. GASTO SANITARIO Y FINANCIACIÓN DE LOS TRATAMIENTOS "No entendemos cuáles son las razones por las que las administraciones no terminan de prohibir el que se fume en todo espacio público cerrado", cuestionó Álvarez, para quien el beneficio económico que supone para el Estado los impuestos que se generan por la venta de tabaco no sería suficiente. A este respecto, subrayó que "sólo en tratamientos contra la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)", los costes sanitarios, laborales y sociales suponen 2.400 millones de euros al año, "o lo que es lo mismo, el 2 por ciento presupuesto anual del Ministerio de Sanidad y un 0,25 por ciento del PIB". "Lo más económico para un país es tener a toda su población sana", sentenció el presidente de Neumosur, quien lamentó que, "mientras que para problemas como la hipercolesterolemia o la hipertensión se financian los tratamientos, para un problema aún mayor como el tabaquismo no se financian sus tratamientos a toda la población". 60.000 MUERTES ANUALES Y FRACASO DE LA POLÍTICAS En este sentido, Álvarez señaló a Europa Press que, "sólo el tabaquismo provoca unas 60.000 muertes anuales", motivo por el que insistió en la necesidad de costear los tratamientos. Además, y en el caso andaluz, ahondó en el "fracaso" de las políticas en materia sanitaria, "como lo demuestra el hecho de que desde 2003 y hasta 2007 la prevalencia de tabaquismo se ha mantenido en el 31 por ciento de la población". De hecho declaró que, según la Encuesta Andaluza de Salud 2003-2007, la prevalencia de fumadores, ex fumadores y no fumadores "se mantiene en valores similares a los de 2003", con un 31,1 por ciento de la población andaluza fumadora (39,5 hombres y 23,1 mujeres). "El gran objetivo es situarnos en la media de países europeos de nuestro entorno y conseguir que menos del 20 por ciento de la población sea fumadora", admitió. DESIGUAL APLICACIÓN DE LA LEY En cuanto a la aplicación de la actual Ley Antitabaco, Álvarez reprochó que la norma "se ha quedado corta en su contenido" y que su aplicación "deja mucho que desear, tanto por la interpretación de la Ley que se está haciendo en algunas comunidades, como por la publicación de decretos autonómicos que no se ajustan a la misma". En el apartado administrativo, precisó que durante el 2006, primer año de aplicación de la ley en España, se realizaron 15.800 inspecciones, lo que derivó en la incoación de 586 expedientes sancionadores. Pese a esta labor, señaló que si se comparan estos datos con otros de países como Holanda, en cuyo primer año de aplicación de una ley similar, se hicieron 35.000 inspecciones con una población 10 veces menor que España, "se ve que en la ley española hay cierta relajación". En España, prosiguió, "se deberían haber hecho 350.000 inspecciones, es decir 20 veces más que las que se han hecho". EFECTOS POSITIVOS DE LA LEY HASTA EL MOMENTO Sea como fuere, reconoció que efectos positivos derivados de la Ley. Así, señaló que la prevalencia de tabaquismo parece haber caído en un 8 por ciento, lo que supone 750.000 fumadores menos que en 2005 (encuesta CIS). Además, las ventas de tabaco se redujeron en un 2,8 por ciento en 2006 y los niveles de nicotina ambiental en los centros de trabajo en un 83 por ciento y en un 53 por ciento en restaurantes. Con todo, lamentó que la caída menor de lo esperado de las ventas de tabaco se debe a que en España "se continúa manteniendo precios relativamente bajos comparado con los países limítrofes", concluyó.