Nadar de forma suave reduce el dolor de espalda y el grado de discapacidad

Polideportivo piscina municipal de Madrid
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 27 julio 2011 18:03

MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -

Nadar, de forma suave y no competitiva, reduce el dolor de espalda crónico, y el grado de discapacidad de quienes sufren esta dolencia según informa la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF) Además, la práctica de este tipo de deporte mejora la salud y calidad de vida de quienes sufren el molesto dolor lumbar.

En este sentido un reciente estudio realizado en Taiwan y publicado por la revista 'Archives of Gerontology and Geriatrics', demuestra que la natación es muy buena para las personas mayores. En el estudio los participantes han realizado tres sesiones semanales de natación de, al menos, 500 metros en estilo libre, bien a espalda o a braza, a una velocidad cómoda. Los resultados de esta prueba fueron comparados con un grupo control de la misma edad que no realizaba ninguna actividad deportiva.

La médico rehabilitador miembro de SERMEF, Francisca Carrión Pérez, destaca que este estudio, "demuestra que la práctica de la natación tranquila y no competitiva mejora notablemente la coordinación y el equilibrio en este grupo de población, lo que supone un importante papel en la prevención de las caídas tan frecuentes y fatales".

"La natación también ha probado ser el único deporte que tiene un papel preventivo en la aparición del dolor de espalda en niños y ayuda a quienes ya lo sufren", añade Carrión.

El deporte acuático, como explica la doctora, ha sido probado en varios estudios realizados en grupos de pacientes de difícil manejo en la práctica clínica, como son los pacientes con fibromialgia, provocando una mejoría de todos los síntomas de la enfermedad.

El común habito de caminar por la arena de la playa, ayuda a los pacientes con lesiones de tobillo y pie a colocar la articulación en la manera correcta en cualquier situación, haciendo que el pie se adapte a distintos terrenos y situaciones de desequilibrio. "Este tipo de ejercicios suponen una correcta actividad para reeducar la propiocepción, por lo que nos puede ayudar en las fases finales de la rehabilitación de un esguince de tobillo", indica la médico rehabilitador.

La doctora Carrión recuerda, que siempre debe ser un especialista el que recomiendo el tipo de tratamiento para una recuperación adecuada, "siempre que haya una lesión concreta debe ser el medico especialista en rehabilitación el que indique el ejercicio adecuado a cada paciente", concluye la doctora.